La OPEP ha decidido hoy en Viena no rebajar su producción conjunta de 30 millones de barriles diarios pese a que varios de los 12 países socios habían presionado para aprobar un recorte que ayude a detener el desplome de los precios.
“Conforme con el interés de devolver el equilibrio al mercado, la Conferencia (ministerial) ha decidido mantener el nivel de producción de 30 millones de barriles diarios(…)”, anunció el cartel petrolero al término de la reunión.
Fuentes de una delegación aseguraron a Efe que los 12 ministros presentes en la reunión no han llegado a un consenso entre quienes dudan de la necesidad de cerrar los grifos, como Arabia Saudí, y quienes, como Venezuela, quieren un recorte para evitar que el precio, que está en sus mínimos de cuatro años, caiga aún más.
“Es una buena decisión porque se dará privilegio a las producciones que son comerciales”, declaró a Efe el ministro de Recursos Naturales No Renovables Petróleo de Ecuador, Pedro Merizalde-Pavón.
El ministro se refería así a la competencia que ha creado el “petróleo de esquisto” extraído principalmente por Estados Unidos gracias a las técnicas de fractura hidráulica.
El representante ecuatoriano opinó que será el mercado los que “pongan el precio” y que los productores tendrán que ajustarse al valor que el mercado dé, incluso si sigue bajando desde el actual nivel de 80 dólares por barril, el mínimo en cuatro años.
“Estamos manteniendo la unidad de la OPEP y cualquier decisión se toma por unanimidad”, aseguró.
Por su parte, la ministra de Petróleo de Nigeria, Diezani Alison-Madueke, recordó que también hay países productores no socios de la OPEP y que también ellos “tendrían que compartir la carga de la caída de los precios del petróleo”.