Renovables  ·  El Cortocircuito

Las empresas 'alucinan' con la complejidad de la subasta de renovables española

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"¿Con qué países compite España para atraer inversión? Los de nuestro entorno han diseñado subastas con esquemas sencillos y visibilidad a largo plazo, entre 10 y 15 años, pero en nuestro país la subasta es totalmente diferente, no hay visión de futuro y es mucho más complicada". Son palabras de Rocío Sicre del Rosal, country manager de EDP Renovables, durante la Jornada de Enerclub ‘Subastas de renovables: Normas, experiencias y propuestas’ con las que coincide el resto de empresas del sector eólico.

Y es que el sector no da crédito al proceso de cálculo que se ha incluido en la normativa para la retribución de los proyectos renovables. "Las subastas de México o de EEUU están bien diseñadas lo que atrae la inversión a largo plazo y además consigue bajar el precio de las ofertas", señala José López-Tafall Bascuñana, director de Regulación de Acciona, "pero en el caso español, ¿qué objetivos tiene quien convoca la subasta?"

A Javier Rodríguez, director de Regulación España de Enel Green Power, no le parece compleja la subasta, "lo que es complejo es el regimen retributivo" y también "la penalización que se ha impuesto, porque no existe en ningún otro país algo semejante". Se refiere a que "en España si te retrasas en los plazos para poner en marcha el proyecto ganador pierdes todos los avales que has puesto, y tampoco podrás volver a presentar ese parque en ninguna otra subasta. Es un castigo desproporcionado".

Y Javier Latorre, director de Regulación Global de Gas Natural Fenosa, concluye que "no he encontrado nada igual a la subasta que se ha organizado en España, es un mecanismo único en el mundo".

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