Las renovables no se fían del todo de las distribuidoras: prefieren solicitar el acceso a la red a REE

La transición energética iniciada en España se apoyará en tres pilares, la electrificación de la economía, la integración de las renovables y la gestión activa de la demanda. Y para que sea posible las redes de transporte y distribución tendrán un papel protagonista. "Vamos a tener que invertir en la digitalización de las redes" decía Raúl Suárez, director de Unión Fenosa Distribución (Naturgy) durante el I Congreso de AELEC, "y no solo son las smart meters, sino en todos los ámbitos del sector".

"Nos encontramos grandes diferencias entre la red de transporte y las de distribución", explicó José María González Moya, director general de APPA Renovables, "no sabemos si es por la facilidad de REE de dar información sobre la saturación de las redes, o por las dificultades de conseguir autorización de las distribuidoras, pero el 70% de los nuevos proyectos solicitan un punto de acceso a REE y el 30% restante a la distribución".

"Es fundamental que el sector renovable exprima esa red de distribución porque está infrautilizada, es decir que si solo el 30% de las solicitudes se realizan para esta red, entonces no se está utilizando todo lo que se debería, y más aún habría que preguntarse por qué", puntualizó González Moya.

"Hoy mismo el 99% de la potencia fotovoltaica para 2030 ya la tenemos con acceso a redes y el 83% de la eólica", señalaba por su parte Miguel Duvison, director general de Operación de REE, "con frecuencia digo que la transición energética ya se inició en España en 2003, 2004 o 2005, que fue lo que impulsó tener el CECOEL (Centro de Control Eléctrico) y como consecuencia, haber podido integrar las renovables".

Precisamente el quid de la cuestión es aprobar cuánto antes el esperado RD de Acceso y Conexión a Redes, que pondría orden en lo que a día de hoy todos señalan como un mercado de especulación. Hace una semana la CNMC anunciaba que a cierre de mes de abril, ya existían 150.000 MW de proyectos de instalaciones de renovables, cogeneración y residuos con garantías depositadas. "Está claro que de esos 150.000 MW menos de la mitad de la mitad son reales, el resto se han pedido para especular", señalan fuentes del sector, "no tiene sentido que se soliciten 150 GW cuando el objetivo del PNIEC para 2030 es de 57 GW en total".

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Estas cifras se conocían tras publicarse la circular de la CNMC previa al RD y sometida a consulta pública hasta el próximo 5 de julio. Y también propone que para evitar que los proyectos que pudieran tener un mero carácter especulativo puedan obstaculizar aquellos que sean proyectos sólidos, propone que el acceso concedido tenga un plazo máximo de seis meses para presentar un proyecto en firme, es decir, que acrediten el grado de avance del proyecto debidamente identificados, y si no es así se arriesgan a perder sus avales, o también propone que se asegure su culminación.

"Las medidas que propone la CNMC son oportunas y cuando se apruebe el RD de Acceso y Conexión limpiará el grano de la paja, porque el acceso es uno de los problemas fundamentales que hay que resolver, aunque no es el único, como por ejemplo la ingeniería, es decir dar resultados técnicos viables, la normativa y la gestión de los recursos, y será posible si todos los agentes hacemos el trabajo", añadía Miguel Duvison de REE.

"El futuro en la generación es el conjunto de renovables más almacenamiento, sistemas híbridos de renovables o estos mismos sistemas con almacenamiento", explicó por su parte Juan V. Márquez, director general de AEE (Asociación Empresarial Eólica), "estamos analizando a detalle las diferentes posibilidades, pero sea cual sea, para las empresas del sector una de sus prioridades es buscar la rentabilidad, cuál será el coste de estas nuevas tecnologías, y después cuáles serán sus beneficios".

También para el responsable de la patronal eólica, la complejidad de solicitar un punto de conexión a una distribuidora es tal que finalmente las empresas optan por solicitarlo al TSO (operador del sistema de transporte). "En función de qué empresa distribuidora sea la encargada de un área geográfica, cambian los procedimientos y también los costes".

"Lo que realmente quiere la sociedad, las renovables, los consumidores en general es que nos coordinemos entre distribución, transporte y generación", concluyó Manuel Sánchez, director general de Redes de Viesgo, "y tenemos las tecnologías para conseguirlo. La realidad es muy sencilla, no deberíamos dar mayor dramatismo a los cambios que ya se están notando".