Primera prueba del Peugeot 408 Hybrid 225: la dimensión paralela

La hoja de ruta de Peugeot pasa por ser una marca 100% eléctrica en 2030 y para ello la firma del león acaba de presentarnos su estrategia e-Lion. Dentro de la misma, su modelo fetiche será sin duda el nuevo 408, que nosotros ya hemos conocido en persona y conducido, pues evoluciona el concepto de los SUV visto hasta ahora.

Y es que estas siglas han copado durante el 2022 el 60% de las matriculaciones de nuestro país con unas estimaciones que no tienen visos de reducirse. Pero la tendencia parece que irá hacia modelos diferentes, con personalidad propia como la de este 408 que aúna bajo una misma carrocería tres siluetas, SUV, berlina y fastback, en lo que vendría a ser una semejanza a lo realizado por Citroën con el C5 X (prueba).

Llama la atención

Cuando Peugeot presentó el modelo por primera vez ya te hablamos de nuestro parecer pero para recordarte te digo que mide 4,69 metros de largo (entre medias del 3008 y del 5008) y que se sostiene sobre la plataforma EMP2, la misma que el 308. En vivo parece ser un coche más grande de lo que en realidad es gracias en parte a una carrocería 18,8 cm separada del suelo y a que tiene una altura de poco más de 1,40 metros.

También propone una calandra grande, con el logo en el centro y el tramado en el mismo color que la carrocería, secundada por unos grupos ópticos estilizados con la luz diurna en forma de colmillo. Pero es en el lateral donde se define su personalidad gracias, entre otros, a los pasos de rueda protegidos, las llantas de hasta de 20 pulgadas y, claro está, por la línea descendente del techo, al estilo de los coupé que no solo rebaja el Cx hasta los 0.28 sino que es la que le dota de personalidad.

Así se llega a una zaga igual o más llamativa con una luneta amplia y un portón muy horizontal con la ya característica firma lumínica en forma de garra y con efecto 3D o en unos paragolpes extra voluminosos en el material plástico antes mencionado en el que se incrusta una especie de pseudo-difusor bastante llamativo. Por cierto, si estás pensando en algunos rivales, decirte que en el caso del Hybrid que nosotros hemos conducido tendrás a los CUPRA Formentor, el comentado C5 X y, por qué no, otros de corte más premium como Q3 Sportback TFSIe.

Casi premium

De puertas para dentro, el salpicadero ofrece el mismo diseño y disposición vistos en el nuevo 308 aunque hay que decir que fue concebido para este 408 siendo el compacto el que se ‘adelantó’ en su estreno. Mantiene el concepto de i-Cockpit del que ya se han vendido más de 9 millones de unidades en estos 10 años pero con el componente 3D de los últimos productos. El volante sigue siendo de reducidas dimensiones y el cuadro está colocado en una posición elevada, digital y con gráficos 3D.

Por último, la pantalla central es de 10 pulgadas e incluye el último sistema multimedia de la marca, siendo rápido, intuitivo y muy personalizable. Cuenta con menús exclusivos para las versiones híbridas enchufables así como mucha conectividad. Además, las versiones más equipadas pueden montar el monitor más avanzado que se complementa con los i-Toogles que dan acceso directo a las funciones que nosotros elijamos. Por su parte, los asientos son cómodos y sujetan perfectamente. Además cuentan con la certificación AGR, pueden ser calefactables e incluir la función de masaje.

Siguiendo con la habitabilidad, si hay una zona a analizar esa es la trasera. Tenemos una distancia entre ejes de 2,69 metros que 2 cm más que la de un 308 y 4 cm menos que la de un 308 SW. Sin embargo, ya ves que hay un buen espacio para las rodillas, pudiendo acomodar a adultos de 1,85 metros sin demasiados problemas. También destaca el espacio para la cabeza incluso pese a la forma coupé de su carrocería. Eso sí, el acceso ya habéis visto que sin ser malo es peor que en el del 3008, por ejemplo.

Un poco más atrás, al maletero se accede mediante un portón eléctrico con función manos libres que será de serie u opcional dependiendo del acabado. Una vez abierto tenemos un amplio hueco a nuestra disposición porque la bandeja se va con el propio portón. En las versiones térmicas tenemos un volumen de 536 litros que está bastante bien mientras que en las phev se rebaja a los 471 litros, que ya es bastante bueno la verdad. Si abatimos las plazas traseras en proporción 60/40 alcanzamos los 1611 y 1545 litros, respectivamente.

Tacto deportivo

En marcha primero os tengo que hablar del comportamiento porque este coche pese a tener la misma base que el 308 me ha parecido que tiene un toque más deportivo, más ágil. El paso por curva es preciso y la capacidad de tracción que destila es buenísima. Transmite muchísima estabilidad gracias, entre otros, al esquema de suspensión: McPherson delante y multibrazo detrás e incluso pese a montar llantas de 20 pulgadas, el tacto de los neumáticos es excelente.

La dirección también me ha parecido precisa e incluso la visibilidad porque este coche en realidad parece que es más grande de lo que es. Dicho esto, hay un par de cosillas que no me acaban de convencer y la primera es sin duda el tacto del freno, demasiado esponjoso en la primera parte del recorrido; la segunda el peso, pues roza los 1.800 kilos y esta masa hay que detenerla.

Tara que corresponde con la versión phev que estamos conduciendo y que es la encargada de suprimir por completo el diésel de la oferta por primera vez en un Peugeot. Por lo tanto la gama mecánica está compuesta por el PureTech de gasolina de 130 CV que tiene un consumo de 6 l/100 y por la dupla Hybrid de 180 o 225 CV a los que en este 2023 se sumará el e-408 100% eléctrico del que no hay información aún pero del que es previsible que monte el mismo sistema que el e-308.

Respecto a los Hybrid, es la mecánica conocida dentro de Peugeot que combina un 1.6 PureTech de 150 o 180 CV con otro eléctrico de 110 CV para dar conjuntamente esos 180 o 225 CV a los que siempre acompaña un par máximo de 360 Nm. La elección entre uno y otro dependerá del nivel de acabado que quieras asociar porque el de 225 CV no está disponible con el más básico.

En ambos la batería es de 12,4 kWh de capacidad bruta lo que les da para homologar una autonomía eléctrica de 63 km. En cuanto a la carga, admite de serie cargas hasta de 3,7 kW aunque en opción puede sumar uno embarcado de 7,4 kW que reduce a menos de 2 horas el tiempo. En marcha tenemos el modo e-Save que permite cargar 10 km, 20 km o la totalidad de la misma disparando eso sí el consumo. ¡Ah! en cuanto a seguridad, un sobresaliente pues cuenta con todos los sistemas y asistentes que monta el 308 actual.

En definitiva

Peugeot está sabiendo leer el mercado. Sus SUV actuales lideran y ocupan los puestos resaltados de sus respectivos segmentos y ahora con este 408 llega para liderar también el de los de corte coupé que, todo dicho sea de paso, tampoco es que esté muy copado actualmente más allá de esos Arkana y Formentor. Sin embargo, por diseño, comportamiento y tecnología, el 408 parece tener todos los argumentos para conseguirlo. Eso sí, optar por él no resulta especialmente barato sobre todo si hablamos de las versiones híbridas enchufables que parten de un precio de 41.350 euros para el 180 CV con acabado Allure y 44.100 euros para el de 225 CV con acabado Allure Pack. En el caso de las versiones GT ya suben a los 45.400 y 46.900 euros aunque se pueden restar 5.000 euros en el caso de acogerse por el plan MOVES III.