Apenas transcurrido un año desde que el Consejo de Ministros autorizara la construcción de un nuevo cable eléctrico entre Menorca y Mallorca, el barco cablero Skagerrak se encuentra ya en Punta Sa Guarda (Ciudadela) para iniciar los trabajos de preparación del tendido submarino para su instalación.
Una vez llevadas a cabo las labores de reconocimiento y preparación de la ruta por la que transcurrirá el tendido submarino de acuerdo al trazado proyectado, el siguiente paso se llevará a cabo de forma inmediata una vez que las condiciones meteorológicas garanticen una ventana de tiempo suficiente que aseguren la integridad y seguridad física de la instalación y de los equipos que están trabajando en ella.
Esta nueva interconexión, cuya puesta en servicio está prevista para el tercer trimestre de 2020, conectará Menorca con el conjunto del sistema eléctrico balear y con el peninsular. Con un coste de 84 millones de euros, mejorará de manera decisiva la seguridad y la calidad del suministro en Menorca, facilitará el avance en la transición energética de Menorca y las Islas Baleares, maximizará la evacuación de energías renovables en condiciones de seguridad para el sistema y reducirá las emisiones de CO~2~ en Menorca.
Al seguimiento de los trabajos han asistido este jueves el vicepresidente del Govern Balear y consejero de Transición Energética y Sectores Productivos, Juan Pedro Yllanes, la presidenta del Consell de Menorca, Susana Mora, el responsable del área de Industria y Energía de la delegación de Gobierno en las Islas Baleares, Santiago García, la alcaldesa de Ciudadela, Joana Gomila, y los alcaldes del resto de municipios de la isla. Tras conocer de primera mano la zona donde llegará el cable submarino, las autoridades han visitado la subestación de Ciudadela. Esta instalación, no solo es una infraestructura esencial para el proyecto del enlace entre las dos islas, sino que además será una herramienta clave para el desarrollo de las energías renovables en Menorca y para hacer más fiable y segura la red existente.
El Skagerrak, de la compañía noruega Nexans, ha comenzado el tendido submarino del nuevo cable en Cala en Bosc (Ciudadela, Menorca). Estos trabajos se estima que finalizarán una semana más tarde en Cala Mesquida (Capdepera, Mallorca).
El enlace está formado por un cable terrestre-submarino tripolar de 132kV, que pesa alrededor de 2.300 toneladas (56,5 kg por metro) y enlaza las subestaciones de Ciudadela y Cala Mesquida, en Menorca y Mallorca, respectivamente. El trazado incluye 41 km submarinos, con una profundidad máxima de 81 metros, y 12,4 km terrestres en Menorca y 800 metros en Mallorca. Los tramos terrestres del enlace son, en las dos islas, soterrados.
En ambos extremos la llegada del enlace a la costa se efectúa mediante perforación horizontal dirigida, una técnica que permite la instalación de una canalización subterránea con un control absoluto. De esta manera es posible evitar los obstáculos del terreno y garantizar la mínima repercusión ambiental, especialmente a través de la salvaguarda de las praderas de fanerógamas y de posidonia en ambos extremos costeros.
En el caso de Cala en Bosc, la perforación horizontal dirigida cuenta con 310 metros de longitud total con una profundidad máxima de 25 metros, mientras que en el caso de Cala Mesquida, tiene una longitud de 800 metros, con un recorrido submarino de profundidad máxima de 20 metros y un recorrido terrestre de 276 metros bajo la playa.
Para el tendido del cable, el barco cablero Skagerrak está equipado con un sistema de posicionamiento dinámico y diferentes dispositivos de monitorización del tendido, lo que permite garantizar que este se realiza de manera acorde al trazado diseñado, cuya finalidad es evitar la afección al medio.
Con posterioridad al tendido, y hasta marzo, se llevarán a cabo las labores de protección del enlace submarino a través de su soterramiento en el lecho marino, mediante las técnicas de jetting^1^ y trenching^2^, con la finalidad, entre otras, de maximizar la integridad y seguridad de la instalación, especialmente ante agresiones externas derivadas de prácticas de fondeo prohibidas.
Jetting. Técnica que se emplea para proteger el cable mediante la inyección de agua a presión. De esta manera, se mueve la arena y el cable cae por su propio peso hasta una profundidad mínima previamente definida. Posteriormente, la arena cae de nuevo sobre él, quedando el cable tapado y protegido.
_Trenching. Técnica que se emplea para proteger el cable mediante el uso de una cortadora. Esta herramienta permite cortar la roca, extrayéndola y haciendo una zanja. Así, el cable se deposite en la zanja y posteriormente se tapa y protege con la misma roca o, en su defecto, con arena. _
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