La industria del petróleo y el gas, que consume mucho carbono, está experimentando una perturbación masiva a medida que más países y empresas intentan implementar emisiones netas cero para 2050. Sin embargo, abordar las emisiones y apoyar a las industrias con bajas emisiones de carbono requerirá una combinación de regulaciones bien diseñadas y una mayor inversión en descarbonización, según la firma de análisis y datos GlobalData.
Según se informa, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) generadas por las operaciones de petróleo y gas, también conocidas como emisiones de Alcance 1 y 2, representaron el 15% del total de emisiones relacionadas con la energía en todo el mundo en 2022. Otro 40% de las emisiones relacionadas con la energía provinieron provenientes del uso de petróleo y gas para generación de energía, calefacción, combustible para vehículos y procesos industriales, también conocidas como emisiones de Alcance 3. En este contexto, los países desarrollados apuntan a cero emisiones netas para 2050, mientras que los países en desarrollo como China e India apuntan a 2060 y 2070, respectivamente.
El informe temático de GlobalData, “Estrategias Net Zero en petróleo y gas”, proporciona una descripción general de los esfuerzos para mitigar las emisiones de la industria del petróleo y el gas. Compara empresas líderes, como BP, Equinor, ExxonMobil, TotalEnergies y Shell, en función de sus emisiones y compromisos netos cero.
Ravindra Puranik, analista de petróleo y gas de GlobalData, comenta: “Las empresas de petróleo y gas están trabajando actualmente para reducir las emisiones de alcance 1 y 2 generadas por sus operaciones. Varias empresas líderes se han fijado el objetivo de alcanzar cero emisiones netas operativas para 2050. Para lograrlo, las empresas se están centrando en la adopción de nuevas tecnologías, como hidrógeno con bajas emisiones de carbono, captura y almacenamiento de carbono; y realizar otros cambios operativos, como desarrollar capacidades de energía renovable y biocombustibles”.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) de 2021 había pedido a los países participantes que desarrollaran estrategias netas cero a largo plazo. La cumbre COP27 de 2022 alentó a los países a considerar soluciones basadas en la naturaleza. Las próximas cumbres COP28 esperan sentar las bases para acelerar la transición energética y reducir significativamente las emisiones antes de 2030.
Bárbara Monterrubio, analista gerente de transición energética de GlobalData, comenta: “Para respaldar los compromisos globales hacia el cambio climático, los países y los organismos reguladores han comenzado a introducir sistemas de comercio de emisiones o mejorar los existentes. Esto está empujando a las empresas a fortalecer sus objetivos internos y diversificar sus carteras hacia productos y tecnologías limpios y sostenibles. Incluso cuando las estrategias de mitigación adoptadas por cada empresa son diferentes, todas convergen en reducir la intensidad de las emisiones y recortar las emisiones operativas, reducir y detener la quema e incluir tecnologías renovables”.
La mayoría de los objetivos netos cero establecidos por las empresas de petróleo y gas cubren las emisiones de Alcance 1 y 2. Para reducir las emisiones de Alcance 3, las empresas de petróleo y gas están cambiando sus productos a fuentes de energía con bajas emisiones de carbono, incluidos hidrógeno, GNL, biocombustibles y energías renovables.
Monterrubio concluye: “Incluso cuando se están logrando rápidos avances en la lucha contra las emisiones upstream y downstream, el cambio a productos con bajas emisiones de carbono es un proceso a largo plazo, y muchas grandes empresas de petróleo y gas se encuentran en las primeras etapas de su estrategia de transición energética. Se necesita una combinación de regulaciones bien diseñadas así como enormes inversiones para abordar las emisiones y apoyar la industria baja en carbono”.
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