La empresa gallega Reganosa ha iniciado de nuevo los trámites para obtener los permisos para su planta de regasificación en Mugardos (El Ferrol).
Reganosa cumple así con lo establecido por sentencia el Tribunal Supremo. El pasado 16 de julio, el TS declaró nula la exención del trámite de evaluación de impacto ambiental que acordó el Consejo de Ministros de 27 de mayo de 2016 respecto a la regasificadora de Mugardos (A Coruña).
La sala de lo contencioso consideró que la importancia de la planta desde la perspectiva ambiental no encaja en las razones de situación excepcional y de inmediata urgencia alegadas por el Gobierno en funciones de Mariano Rajoy para excluir el trámite de evaluación de impacto ambiental.
La sección quinta de la sala de lo contencioso estimó parcialmente el recurso que presentó la Plataforma de Vecinos de la Parroquia de Mehá contra el citado acuerdo por el que se declaraban excluidos del trámite de evaluación de impacto ambiental los proyectos de la planta de recepción, almacenamiento y regasificación de gas natural licuado en Mugardos.
Anuló el acuerdo pero rechazó la petición de los recurrentes de que se declararan también nulos todos aquellos actos y autorizaciones derivados del mismo.
Ahora Reganosa vuelve a poner en marcha los trámites administrativos. Según el BOE, se somete a información pública la solicitud de autorización administrativa, el proyecto de ejecución y el estudio de impacto ambiental de la planta de recepción, almacenamiento y regasificación de gas natural licuado en el lugar de Punta Promontoiro, Mugardos (A Coruña).
La regasificadora lleva 10 años funcionando y lo seguirá haciendo mientras se tramitan ahora los permisos. Según ha podido saber El Periódico de la Energía, la evaluación ambiental a la que someterá Reganosa a la planta de Mugardos será la más rigurosa para que así no existan problemas y se vea que la planta respeta el entorno.
La planta regasificadora de Mugardos consta de dos tanques criogénicos con una capacidad de almacén de 150.000 metros cúbicos de gas licuado cada uno y una capacidad máxima de vaporización de 412.800 Nm³/h, dos cargaderos de cisternas y con un atraque capaz de gestionar descargas de buques metaneros de hasta 270.000 metros cúbicos de capacidad.