Los generadores de electricidad renovable en el Reino Unido se verán afectados por un impuesto inesperado del 45% a partir del nuevo año. La medida "temporal" fue anunciada por el ministro de economía, Jeremy Hunt en la Declaración de Otoño y estará vigente hasta 2028.
Los documentos del Tesoro indican que el impuesto a los generadores de electricidad será un nuevo impuesto del 45% sobre los ingresos extraordinarios que superen el precio de referencia anterior a la crisis de 75 libras/MWh, que se aplicará a determinados generadores de electricidad renovable, nuclear y de biomasa.
Excluirá los proyectos del régimen de Contratos por Diferencia (CfD) y también incluirá un pequeño "de minimos" para excluir a los pequeños generadores.
El Gobierno ha afirmado que "no se espera que el impuesto perjudique a las inversiones a largo plazo", ya que sólo se aplica a una parte de los beneficios excedentes y los generadores podrán seguir deduciendo sus inversiones del impuesto de sociedades. Sin embargo, los grupos de la industria han criticado los "desconcertantes" planes que corren el riesgo de socavar la confianza de los inversores en el mercado británico.
Hunt declaró ante el Parlamento británico: "La estructura de nuestro mercado energético crea beneficios inesperados para la generación de electricidad con bajas emisiones de carbono, por lo que a partir del 1 de enero hemos decidido introducir un nuevo gravamen temporal del 45% para los generadores de electricidad".
Dijo que la medida, unida a la tasa sobre los beneficios de la energía impuesta a principios de este año a las empresas de petróleo y gas y aumentada ahora del 25% al 35%, se espera que recaude 14.000 millones de libras para el Tesoro el año que viene.
Más intervenciones
La medida forma parte de un paquete más amplio de intervenciones financieras anunciadas, en el que el jefe del Tesoro expuso su estrategia para hacer frente a los problemas de las finanzas públicas del Reino Unido mediante una serie de recortes del gasto y subidas de impuestos.
La decisión de imponer un impuesto sobre las ganancias inesperadas se aleja de los planes de la anterior Primera Ministra, Liz Truss, de limitar los ingresos de los productores de energías renovables a partir del año que viene, lo que se conoce como Límite de Ingresos por Coste.
Según el Gobierno, la nueva tasa es un enfoque "más proporcionado" que se puede administrar a través del sistema de impuesto de sociedades y dejará a los generadores "una mayor proporción de sus ingresos para invertir en el crecimiento de la capacidad de energía renovable del Reino Unido".
A pesar del asalto a las ganancias de los generadores de energías renovables, Hunt dijo que la energía sigue siendo una "prioridad de crecimiento" para el gobierno conservador. "A largo plazo sólo hay una manera de dejar de estar a merced de los precios internacionales del gas: la independencia energética combinada con la eficiencia energética", añadió.
"Gran Bretaña es líder mundial en energías renovables, pero tenemos que ir aún más lejos con una gran aceleración de las tecnologías de cosecha propia como la eólica marina, la CAC y, sobre todo, la nuclear".
Hunt confirmó que el gobierno seguirá adelante con los planes para la planta nuclear Sizewell C en Suffolk, al tiempo que anunció una campaña de eficiencia energética de 6.000 millones de libras para hogares y empresas a partir de 2025.
Se espera que el Departamento de Empresa, Energía y Estrategia Industrial ofrezca más detalles sobre este plan, así como sobre la forma en que el Gobierno reforzará la independencia energética, a su debido tiempo.
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