La ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha afirmado que con Francia cuesta avanzar en interconexiones energéticas que permitan reducir la dependencia de la Unión Europea de países como Rusia.
La también vicepresidenta tercera así lo ha asegurado en el evento "Madrid y Barcelona, dos ciudades de vanguardia", organizado por EY y La Vanguardia, y en la que se analizan las capacidades de estas dos grandes urbes para impulsar la economía del conocimiento, el talento y el nuevo paradigma de crecimiento basado en la sostenibilidad.
Preguntada por si no se debería potenciar una interconexión desde Barcelona con el centro y el norte de Europa del gas que llega a España desde Argelia, ha respondido que Francia es un país con el que hay "muchas afinidades y sinergias, pero con el que cuesta mucho avanzar al ritmo que corresponde en interconexiones".
Según ha explicado esto no puede llevar a un "callejón sin salida", ni "puede ser que la presión para acelerar esta infraestructura se quede de Pirineos para abajo, porque al otro lado del Pirineo se necesita una inversión bastante cuantiosa para conectar esa tubería de gas al sistema troncal".
Para Ribera es un tema "capital" para garantizar el suministro a los países europeos que necesitan gas por su fuerte dependencia de Rusia, como es el caso de Alemania, ha recordado.
Por ello ha defendido que sea una infraestructura que está técnicamente preparada no solo para transportar gas, sino también hidrógeno a medio plazo.
En su opinión, debe contar con financiación europea, ya que es para garantizar el suministro de esos países, no de España, que se encarga del 30 % de la regasificación total de la Unión Europea, pero tiene una capacidad de exportación "muy limitada".
La ministra ha destacado que este proyecto es antiguo, pero que la Unión Europea lo desechó por no ser rentable.
Sin embargo, ahora con la invasión de Rusia este proyecto tiene "sentido", ha considerado Ribera.
También ha defendido que en la Unión Europa se tome una decisión ya para que el precio del gas no se tenga en cuenta a la hora de fijar el de la electricidad, como sucede ahora.
Según la ministra, esta decisión se podría tomar en el Consejo Europeo formal de los próximos días 24 y 25, después de que en el informal de Versalles (Francia, 10 y 11 de marzo pasados) se haya entendido y aceptado muy bien.
"Sí lo vamos a conseguir. Técnicamente cuando menos invasivo sea, más sencillo, más rápido y más fácil" será, ha estimado.
Es parecido a lo que se hizo en su momento con la suspensión temporal de la regla de gasto para los estados miembros, ha indicado Ribera.
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