La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha destacado la importancia de "fortalecer la trazabilidad" de los productos petrolíferos que entran en la Unión Europea, para evitar "la picaresca" de que estén mezclados con combustibles procedentes de Rusia.
En una entrevista concedida este viernes al programa Espejo Público de_ Antena 3_, Ribera ha asegurado que el Gobierno está en estrecho contacto con la Comisión Europea, y ha dicho que se trata de un trabajo que "pone de manifiesto" que la disciplina comunitaria "necesita todavía ser afinada".
"Es muy importante fortalecer la trazabilidad de todos esos productos, garantizar que la refinería de origen diga cuánto, en qué condiciones y en qué volumen se está expidiendo (el producto) para evitar este tipo de picaresca que, evidentemente, hay que corregir", ha apuntado.
La ministra se ha referido así a la posibilidad de que pueda estar habiendo una entrada de petróleo y de sus productos derivados en suelo de la Unión Europea con una "acreditación documental que parece correcta", y que, sin embargo, llega en barcos "que han parado en puertos intermedios o han pasado por puerto ruso".
Las compras a Rusia por terceros
Hace una semana, fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica avanzaban que España planteará a Bruselas que se ponga en marcha "de inmediato" una respuesta europea para reforzar la trazabilidad de todas las importaciones energéticas que llegan a la Unión Europea, evitando que combustibles rusos sobre los que pesan sanciones lleguen hasta los puertos comunitarios.
El certificado sería no sólo de los puertos, también de las refinerías de donde sale el producto o del exportador de las minas de carbón, y deberían aparecer contrastados todos los elementos -volumen, fecha- para garantizar que las importaciones no están sujetas a los paquetes de sanciones aprobados.
El pasado febrero entró en vigor en la Unión Europea la prohibición de importar diésel y otros derivados petrolíferos de Rusia, después de hacer lo propio con el carbón y el crudo procedentes de aquel país, en el marco del mecanismo de sanciones por la invasión de Ucrania que busca asfixiar financieramente al Kremlin.
De acuerdo con Bloomberg, la Unión Europea ya estaría discutiendo un nuevo mecanismo dirigido a terceros países que podrían no estar haciendo lo suficiente para evitar que Rusia evada las sanciones.
Según los últimos datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), las importaciones de petróleo bajaron en marzo un 7,8 % respecto al mismo mes del año pasado, hasta los 4,69 millones de toneladas, sin que por octavo mes consecutivo hubiera importaciones procedentes de Rusia.
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