Toyota implanta sus camiones de hidrógeno para descarbonizar el transporte europeo

Mientras que la mayoría de fabricantes está pendiente de la electrificación para los turismos y todoterrenos, hay fabricantes como Toyota que siguen apostando por soluciones alternativas. Porque en innumerables ocasiones y en boca de sus diferentes CEO, ha mostrado su apuesta por el hidrógeno. Así lo ha confirmado con vehículos como el Mirai que lleva años comercializándose en el centro de Europa y así lo ha demostrado con los últimos prototipos del Corolla Cross y el Hilux.

Pero ahora da un paso más, uno de mayor tamaño tras unirse con la empresa holandesa VDL Groep (VDL) para irrumpir en el mercado de los camiones de gran tonelaje e implantar su tecnología de hidrógeno para así suprimir las emisiones contaminantes y acelerar la descarbonización del sector de la logística por carretera, un factor de gran importancia para implantar la estrategia de total neutralidad en carbono de TME para 2040.

Para final de año

El menor peso de los sistemas a base de hidrógeno permite cargas más pesadas, mientras que la rapidez del repostaje resulta esencial para un tipo de transporte con elevada utilización. El hidrógeno se puede repostar con la misma rapidez que el gasóleo, y los patrones de uso de los camiones, con una demanda de mayores volúmenes de hidrógeno, hace que su aportación sea clave para el desarrollo de unas infraestructuras sostenibles en torno a las rutas principales.

VDL Groep lo fabricará para verano de 2023, al que seguirá la producción de más vehículos, cuyo uso se evaluará en las rutas logísticas de TME en otoño de 2023. El proyecto irá acumulando aprendizajes sobre el despliegue de los camiones de pila de combustible, lo que reforzará la base de la visión a largo plazo de la compañía para descarbonizar la logística y reducir la huella de carbono de Toyota más allá de la electrificación de los turismos. Y es que los camiones de pila de combustible desempeñan también un papel clave en el crecimiento del ecosistema europeo del hidrógeno en su conjunto, que es la base para la descarbonización del transporte y para una transición energética ecológica. Los vehículos de gran tonelaje son esenciales para generar niveles saludables de oferta y demanda de hidrógeno. La rentabilidad del sistema estimulará el desarrollo de una infraestructura sostenible, y permitirá el surgimiento de nuevas aplicaciones de movilidad. La infraestructura necesaria para estos camiones puede dar servicio a otros vehículos de hidrógeno, que pueden utilizar las mismas estaciones de repostaje.