Este Domingo de Ramos que se ha celebrado en España en estado de alarma y confinados la mayor parte de los ciudadanos ha traído consigo varias peculiaridades en el mercado eléctrico español.
Lo primero de todo es que el precio del mercado mayorista de la electricidad, también conocido como 'pool' ha registrado el precio diario más barato en lo que va de año. El precio medio de este domingo fue de 8,16 euros por MWh.
Asimismo, también se dio el precio horario más barato de este 2020. A las 16.00 horas se marcó un precio de 1,95 euros/MWh.
Pero no solo es esto. En el mercado continuo de la electricidad, se han registrado precios negativos en el mercado MIBEL. Por tanto ya se puede decir que en España se han visto precios negativos por primera vez en el mercado eléctrico. Era poco volumen, pero se vieron precios de -2,5 /MWh en el día de ayer. Y muchos ceros durante varias horas.
La principal causa de esta fuerte caída de los precios está en la demanda eléctrica. La punta de demanda máxima este Domingo de Ramos alcanzó los 25.707 MW cuando el 8M, aún sin haberse decretado el estado de alarma, el consumo máximo fue de 30.485 MW. En el caso del dato mínimo de demanda, este domingo se alcanzó los 16.500 MW, un dato muy bajo respecto al 8M que fue de 20.794 MW.
En total, hay 4.000 MW de demanda menos, más de un 20% menos de consumo eléctrico, que hicieron, entre otras cosas, que las centrales nucleares tuvieran que reducir potencia por primera vez durante esta crisis del coronavirus.
Y además, no lo han hecho una o o dos centrales, sino que lo han tenido que hacer todas, en mayor o menor medida. Así, Almaraz I ha pasado de 1.049 MW a 915 MW, Almaraz II de 1.044 MW a 651 MW, Ascó I de 1.032 MW a 946 MW, Ascó II de 1.027 MW a 688 MW, Cofrentes de 1.092 MW a 630 MW, Vandellós II de 1.087 MW a 716 MW y Trillo de 1.066 MW a 560 MW. En total, 2.291 MW menos de la potencia máxima de las centrales.
La que más ha bajado es Trillo con 506 MW y la que menos Ascó I con solo 86 MW, prácticamente nada.
¿Qué significa esto? Lo primero de todo es que en situaciones de baja demanda, España tiene sobrecapacidad y eso que se aprovechó para exportar electricidad a todos nuestros vecinos, Portugal, Marruecos y Francia.
Además refleja que la caída de la actividad económica está estresando el sistema eléctrico en todo el territorio. No es un problema de una zona, sino que se ha tenido que reducir la potencia de las nucleares en Cataluña, Extremadura, Castilla La Mancha y Valencia.
Esta reducción de potencia hizo que hubiera unos minutos en los que la fotovoltaica estaba inyectando a la red más electricidad que la nuclear. Pero no es la primera ni la última vez que veamos eso. Y claro, no por la noche.
Dabama
06/04/2020