
La investigadora y microbióloga española Gemma Reguera, de la Universidad de Michigan (MSU), sigue mejorando sus trabajos sobre la bacteria que neutraliza el uranio y otros residuos nucleares.
Reguera ha trabajado ahora para aumentar el rendimiento de los nanocables electroconductivos de la bacteria. Además, ha dotado al microorganismo de una armadura adicional que impide que el uranio atraviese su película biológica cuando es expuesto a altas concentraciones de este material radiactivo. Este escudo, que refuerza la supervivencia de la bacteria, mejora así su capacidad de neutralizar residuos nucleares.
El trabajo, que ha contado con la colaboración de otros científicos de la MSU como Dena Cologgi, Allison Speers, Blair Bullard y Shelly Kelly, tiene entre sus futuras líneas de investigación el descifrado de las claves detrás de esta película biológica, como su “gran efectividad” a la hora de proteger estas bacterias y cómo puede mejorarse esta protección, según Reguera.