A tortas por una central nuclear

El consorcio formado por el grupo francés Areva y el alemán Siemens ha revisado al alza la cantidad que reclama a la eléctrica finlandesa TVO, hasta 3.500 millones de euros, por la central nuclear que le están construyendo en la costa oeste de Finlandia.

Esta revisión de la demanda en el contencioso ante la Cámara de Comercio Internacional se explica por "tener en cuenta justificaciones afinadas y los intereses acumulados hasta ahora", señaló hoy Areva en un comunicado.

Esos 3.500 millones de euros responden a la "carga de trabajo adicional" en la construcción de la central de Olkiluoto (OL3) respecto al plan inicial, a las "perturbaciones" y a "una prolongación del proyecto", añadió.

Pero TVO exige al consorcio Areva-Siemens una indemnización que podría alcanzar los 2.300 millones de euros para el periodo que va hasta finales de 2018, a causa del retraso que acumula el proyecto.

La compañía francesa -de titularidad estatal- advirtió de que el procedimiento de arbitraje "podría continuar varios años".

También hizo notar que el proyecto de OL3 prosigue conforme al programa que presentaron a TVO el pasado 29 de agosto, y que el consorcio que forma con Siemens tiene intención de concluirlo "tan rápido como sea posible garantizando el mejor nivel de seguridad del reactor".

Según su compromiso de finales de agosto, los constructores de la central deben finalizar las obras a mediados de 2016 para una entrada en servicio como muy pronto en 2018, nueve años más tarde de lo que se había previsto inicialmente.

Areva, que acusa a la eléctrica finlandesa de haber ralentizado las obras de este reactor atómico de nueva generación de tipo EPR por procedimientos puntillosos y controles lentos, ha tenido que establecer en sus cuentas hasta ahora provisiones de 3.900 millones de euros.

De acuerdo con los términos del contrato inicial de 2003, el consorcio franco-alemán debía entregar en mano la central terminada, con una potencia de generación eléctrica de 1.600 megavatios, a un precio prefijado en 3.000 millones de euros.