ABB ha probado con éxito en su fábrica de Córdoba una forma económica de sustituir el aceite aislante derivado del petróleo de los transformadores por aceite vegetal, en el mayor autotransformador sellado del mundo, de 200 mega voltamperios (MVA) y 420 kilovoltios (kV). Esta importante innovación tecnológica supone un avance sustancial en el desarrollo de transformadores de alta tensión respetuosos con el medio ambiente.
Los fabricantes de transformadores han utilizado tradicionalmente aceites minerales derivados del petróleo como fluido aislante. En la actualidad, ABB utiliza cada vez más como aislante ésteres obtenidos a partir de aceites vegetales, porque son biodegradables, no tóxicos y ofrecen mucha mayor resistencia al fuego.
Markus Heimbach, director del negocio de transformadores de ABB, dentro de la división Power Grids, asegura: “Este proyecto está completamente alienado con nuestra visión de hacer que los transformadores nuevos y ya existentes sean más seguros y ecológicos sin comprometer su rendimiento. Estamos comprometidos a apoyar a nuestros clientes con sus iniciativas de mejoras medioambientales, fabricando transformadores de alto rendimiento con diseños respetuosos con el medio ambiente, eficientes energéticamente y que suponen una alternativa fiable para un futuro sostenible”.
ABB desarrolló un procedimiento de sustitución que evita cambiar los componentes más costosos y complejos del transformador, con lo cual las unidades que están en servicio pueden vaciarse de aceite mineral y rellenarse con éster, manteniendo los costes y los tiempos al mínimo.
Utilizando simulaciones de última generación y herramientas de evaluación, ABB modificó un transformador de 420 kV con aceite mineral, sustituyéndolo por éster con solo cambiar las bornas, el regulador en carga y el medio aislante.
ABB fue pionera en el uso de éster fluido en la década de 1990, y dispone de extensos conocimientos y de datos de investigación de los resultados de este aislante para diferentes tipos de transformadores y niveles de tensión. Esta solución de aislamiento también puede aplicarse a nuevos transformadores con tensiones de hasta 550 kV.
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