Después de más de siete horas de negociaciones, el Parlamento Europeo, la Comisión y el Consejo, el denominado trílogo, ha alcanzado un acuerdo sobre la gobernanza. Un acuerdo en el que se podría decir que ha ganado el Consejo y los gobiernos nacionales frente a las tesis del parlamento, tal y como sucedió en la directiva de eficiencia en la tarde de este martes.
Finalmente, no habrá fecha para convertir a la UE en una economía cero emisiones. El plan del Parlamento era ponerle fecha, a 2050, pero el Consejo y la Comisión no pasaban por la que parecía una línea roja para los negociadores del europarlamento encabezados por el verde Claude Turmes.
De acuerdo con la redacción final acordada, la UE apuntará a una economía con cero emisiones de carbono "lo antes posible". Según cuenta el propio Turmes al portal Euractiv, "la Comisión y el Consejo estaban en contra de mencionar una fecha".
Una Comisión que volvía a celebrar el acuerdo, en este caso, en forma de gol. Hat trick, puso en Twitter, Miguel Arias Cañete, que voló a Bruselas durante la noche para estar en las negociaciones. Lo dijo en referencia al acuerdo en renovables de la semana pasada y al de eficiencia al de la pasada tarde.
https://twitter.com/MAC_europa/status/1009267725607358464
Solo viendo la foto se puede ver que no ha sido un gran éxito para los parlamentarios, si se compara con la de hace una semana tras el acuerdo de renovables.
Según el acuerdo, la Comisión deberá presentar una propuesta antes del 1 de abril de 2019 para diseñar una estrategia a 2050 de la UE para las emisiones de gases de efecto invernadero en línea con el Acuerdo de París, con un análisis que tenga en cuenta dos cosas:
- El "presupuesto de carbono" a nivel mundial y de la UE para mantener el calentamiento global "muy por debajo de los 2 ° C" y cerca de 1,5 ° C; y
- Escenarios de la contribución de la UE al objetivo de lograr emisiones netas cero para 2050 y emisiones negativas posteriores.
Planes nacionales
Lo que sí consiguió el Parlamento es que los 28 estados miembro tengan que elaborar una hoja de ruta para llevar a cabo esa descarbonización. Es decir, tienen que elaborar un plan nacional de energía y clima para el 2030 antes de que finalice 2018 y para el siguiente año, a 31 de diciembre de 2019, presentar el del año 2050.
Dos estrategias que tendrá que elaborar el nuevo gobierno socialista de Pedro Sánchez y que seguramente irán encaminadas más a conseguir esas emisiones netas cero en 2050 que otra cosa. Ese es el deseo de Teresa Ribera desde hace tiempo.
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