Aragón pega un acelerón a todos los parques eólicos ganadores de las subastas para llegar a 2020

Aragón quiere convertirse en potencia eólica y podría conseguirlo. Y todo gracias a una legislación autonómica favorable que permite declarar esos proyectos como inversión de interés autonómico y que acelera todos los trámites administrativos hasta incluso la mitad de tiempo de lo normal. Por el momento, ya suman casi la mitad de todos los megavatios ganadores de las tres subastas.

En marzo pasado consiguieron la declaración de inversión de interés autonómico 16 parques eólicos, por un total de 382 MW, que correspondían principalmente a la filial de Forestalia y ganadora de la subasta de 2016, Energías Eólicas de Aragón, y a Jorge Energy. Según fuentes del sector, también algunos megavatios ganados en subasta por EDP han conseguido la misma calificación, y por tanto también se construirán allí.

Y en septiembre, muchos más. El Consejo de Gobierno declaraba como inversiones de interés autonómico los proyectos de 24 parques eólicos promovidos por sociedades mercantiles del grupo Forestalia y otros cuatro de sociedades de Gamesa.

Forestalia había solicitado la declaración de interés autonómico para un total de 31 proyectos de parques eólicos que sumarían una potencia de 1.193,5 MW, pero por razones técnicas han quedado fuera siete de estos proyectos, con los lo que han obtenido la declaración de interés autonómico 24, cuya potencia total es de 907 MW.

En el caso de Gamesa, los cuatro parques eólicos declarados de interés general suman una potencia total alcanza 147,75 MW y según los promotores, y supondrán una inversión aproximada de 160 millones de euros.

También se han declarado de interés autonómico dos parques eólicos promovidos por la sociedad Gas Natural Wind 4, que suman una potencia total de 59 MW y suponen una inversión de aproximadamente 67 millones de euros.

Y Aragón acaba de otorgar dicha denominación a otros dos parques más, promovidos por la Sociedad Energías Eólicas y Ecológicas, en la comarca de Cuencas Mineras, con una inversión de 79,8 millones de euros y una potencia total de 84 MW.

"Con esta legislación favorable, el Gobierno de Aragón permite que los trámites administrativos para la construcción de un proyecto eólico, aún siendo los mismos, se reduzca el tiempo para su realización a la mitad, y no solo los trámites autonómicos sino también los de ámbito local y municipal", explica Forestalia, "se mantiene el periodo de un mes para la información pública, para que ese plazo sea garantista, pero se agiliza la gestión y la respuesta por parte de la Administración, y nos consta que los funcionarios están haciendo un formidable esfuerzo para lograrlo".

Forestalia señala que mientras realiza todo ese proceso, paralelamente gestiona la búsqueda de financiación y el acuerdo con los propietarios de los terrenos donde se va a ubicar el parque, "pero este asunto también está resultando relativamente sencillo, porque se están llegando a buenos acuerdos de arrendamiento con los dueños de los terrenos, tanto es así que en los primeros proyectos, como el llamado proyecto GOYA, ya tenemos el 100% de los acuerdos".

"Con la política de fomento e impulso de la eólica, Aragón duplicará su potencia renovable hasta los 4.000 MW, y tiene hueco de sobra en recursos eólicos", explican fuentes del sector eólico, "sin embargo en términos de evacuación de red estarán a sus posibilidades".

Y mientras el Gobierno de Javier Lambán hace sus deberes, el resto de comunidades autónomas parece estar deshojando la margarita, "¿en qué están pensando el resto de los gobiernos autonómicos, con lo que supone la llegada de nueva potencia eólica para sus territorios? Son más ingresos gracias a los arrendamientos, más actividad económica, más fijación de la población rural, más impuestos y encima coste cero para el consumidor", añaden las fuentes, "no hay otra actividad que pueda generar tanto con tan poco, a excepción de la fotovoltaica".

Mientras despiertan regiones como Galicia, Castilla y León o Andalucía (Tarifa), ya que poseen los mejores vientos de la península junto con Aragón, esta última se escapa del pelotón para convertirse en una potencia renovable.