Argelia se aprieta el cinturón para afrontar la caída de precio del petróleo

El primer ministro argelino, Abdelmalek Selal, anunció nuevas restricciones presupuestarias para hacer frente a la fuerte caída de los precios de petróleo en el mercado internacional. Según Selal, se congelarán en 2015 las contrataciones en la función pública de todos los sectores.

La función pública en Argelia permite absorber un gran número de desempleados, especialmente en las ciudades meridionales del país donde son recurrentes las manifestaciones y protestas sociales para reclamar trabajo y vivienda.

Además, Selal anunció otras medidas restrictivas como la reducción del presupuesto destinado a las inversiones públicas y otros recortes en los gastos de funcionamiento de la administración pública. El primer ministro subrayó que los proyectos que "no revisten un carácter urgente" como los relacionados con el tranvía o el transporte ferroviario serán prorrogados.

Las declaraciones de Selal se producen tras el llamamiento de movilización lanzado por el presidente de la República, Abdelaziz Buteflika, para hacer frente a la crisis del petróleo que calificó de "grave".

Una crisis grave

Buteflika advirtió en el consejo ministerial celebrado el pasado martes que la crisis actual de los precios del petróleo es "grave, con perspectivas imprevisibles a corto plazo", así como pidió al primer ministro tomar las medidas económicas y fiscales necesarias para hacer frente a esta situación. El primer ministro argelino afirmó que el Gobierno seguirá la evolución de la situación y examinará todas las posibilidades. En cuanto a la producción petrolera nacional, Selal indicó que la producción del país aumentará a partir de 2016 y descartó la posibilidad de congelar las inversiones en este sector.

A mediados de este mes, el gobernador del Banco Central argelino, Mohamed Laksaci, advirtió también de la drástica caída de los precios de petróleo sobre la balanza de pagos del país magrebí.

La economía argelina depende en gran medida del sector de los hidrocarburos, que contribuye con un 26,2 % en el PIB y cuyas ventas constituyen el 97% del total de las exportaciones.