Powen, compañía líder en el autoconsumo energético a través de instalaciones solares fotovoltaicas, augura que para 2030 el mercado del autoconsumo solar en España alcance los 30 GW de potencia instalada. Estas previsiones, que equivalen a más del doble de las previsiones procedentes de la Hoja de Ruta del Autoconsumo del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, son para José Benjumea, CEO de la compañía, “ambiciosas, pero reales”.
“España está viviendo una profunda y vertiginosa transformación de su realidad energética. La sociedad está tendiendo hacia una electrificación de su demanda, pues sabe que produciendo y consumiendo su propia energía, no solo ahorran económicamente hasta el 70% en su factura de luz, sino que además disminuyen su huella medioambiental”, destaca Benjumea, quien añade que para alcanzar esos niveles de crecimiento y llegar a los objetivos europeos de Net Zero de 2050 “vemos imprescindible ofrecer soluciones de autoconsumo compartido”.
Autoconsumo colectivo para todos
Nuestro país cuenta con ciudades con la mayor densidad de población de Europa, con hasta 55.000 personas por km2. El 65% de los habitantes vive en edificios, pero muchas de las cubiertas están en desuso y no dan ningún valor a sus propietarios. Conscientes de ello, POWEN se ha marcado como objetivo revertir esta situación y rentabilizar de la manera más sostenible posible los tejados de los bloques de viviendas y oficinas.
Para cumplir con esa meta, Powen lanza sus soluciones de autoconsumo colectivo para acercar el sol a las ciudades. Esta modalidad de autoconsumo está pensada para que bloques de viviendas, comunidades de vecinos, oficinas y otros edificios que comparten tejado puedan tener acceso a la energía limpia y 100% renovable que se genera a través de paneles solares instalados en las cubiertas. De esta manera “los consumidores ven un ahorro en su factura eléctrica por la energía que reciben de su instalación a través de la red”.
Las modalidades de Powen
“Desde POWEN apostamos por el autoconsumo energético colectivo, porque confiamos en que se convierta en el sistema más extendido, como una de las soluciones más prometedoras para eliminar la dependencia de las fuentes de energía tradicionales y potenciar una transición energética que permita a personas y empresas un futuro más sostenible económica y medioambientalmente”.
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