Azerbaiyán recibió solicitudes de más de diez países europeos para el inicio o el incremento de suministro de gas a Europa y actualmente estudia las posibilidades de satisfacerlas, declaró hoy el presidente azerí, Ilham Alíev.
“Tras el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania, Azerbaiyán recibió solicitudes de más de diez países europeos con la petición de incrementar o comenzar los suministros de gas, y ahora estudia las posibilidades de esto”, afirmó el mandatario.
Alíev señaló que su país “hace todo lo posible para incrementar los suministros de energía, para incrementar los suministros de gas por el gasoducto Trans Adriático (TAP)”.
“Estamos al tanto del incremento de la demanda del gas azerbaiyano. Pero, para ello, es necesario incrementar la capacidad de tránsito del gasoducto TAP. No podemos hacer esto de modo unilateral, ya que nuestra participación es solo del 20 %”, explicó.
Alíev expresó su esperanza de que “en un futuro próximo se tome una decisión al respecto, ya que el TAP ya funciona al máximo de su capacidad”.
El gas de Azerbaiyán
El TAP, puesto en marcha en diciembre de 2020, transporta el gas azerbaiyano desde yacimientos del mar Caspio hasta Europa y es parte del Corredor Sur de Gas.
Al referirse a la ampliación de la geografía de los suministros de gas azerí, Alíev subrayó que Bakú “apoya totalmente las iniciativas europeas dirigidas a la construcción de gasoductos de interconexión”.
“La puesta en marcha de uno de ellos, entre Grecia y Bulgaria, tuvo lugar en octubre en Sofía, y yo estuve presente. El segundo, entre Bulgaria y Serbia, estará listo el año que viene”, indicó.
Además, señaló que Bakú “trabaja activamente” con el Gobierno de Albania para la creación de una red distribuidora de gas en ese país.
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