La patronal que reúne a las empresas petroleras en Brasil defendió este sábado un acuerdo que permita la explotación de los gigantescos yacimientos proyectados frente a la desembocadura del río Amazonas ante la posibilidad de que los organismos ambientales nieguen la respectiva licencia.
El Instituto Brasileño de Petróleo y Gas (IBP), patronal del sector, manifestó su posición en un comunicado que divulgó un día después de que se filtraran documentos en los que técnicos del Instituto Brasileño de Medio Ambiente (Ibama) recomiendan a la dirección del órgano denegar la licencia debido al riesgo ambiental de explotar una región tan sensible.
El ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira, admitió haber entrado en contacto con el presidente del Ibama, Rodrigo Agostinho, para pedirle una "solución" que permita la expedición de la licencia ambiental pese a las objeciones de los técnicos del órgano.
El IBP aseguró en su comunicado que defiende el desarrollo de la exploración y la producción en áreas con gran potencial pero que aún no han sido exploradas, como el Margen Ecuatorial, como es conocida la cuenca marina del océano Atlántico ubicada frente a la desembocadura del Amazonas.
El Instituto "apoya el movimiento y las recientes declaraciones del ministro de defender la actividad exploratoria y buscar una solución para la concesión de licencia para la perforación en la desembocadura del Amazonas con el objetivo de comprobar la presencia de petróleo y si es viable la explotación económica en la región".
La petrolera brasileña Petrobras sólo depende de la licencia ambiental para comenzar a realizar prospecciones en el Margen Ecuatorial, una región en aguas profundas del Atlántico en la que Guyana y Surinam ya descubrieron reservas con hasta 13.000 millones de barriles de crudo.
Las autoridades ambientales siguen con dudas
La concesión de la licencia ambiental afronta resistencias entre las autoridades ambientales, ya que su explotación amenaza un delicado sistema de arrecifes de coral en el Atlántico.
Según un parecer que el director de Licenciamiento Ambiental del Ibama, Regis Fontana Pinto, envió el pasado jueves a la dirección del órgano al que EFE tuvo acceso, aún hay dudas sobre el Plan de Protección de Fauna presentado por Petrobras y sobre los efectos que la actividad petrolera puede tener en la desembocadura del Amazonas que impiden la concesión de la licencia.
El organismo técnico, sin embargo, reconoce que la presidencia del Ibama tiene autonomía para conceder la licencia y condicionarla a que Petrobras atienda las exigencias de los técnicos.
"La decisión de abrir o no una nueva frontera de explotación de petróleo depende de una evaluación político-estratégica que tiene que ser tratada en un área diferente a la del licenciamiento ambiental, ya que el Ibama es tan sólo un órgano ejecutor de las políticas establecidas por las partes responsables por las políticas ambientales y energéticas del país", admite Fontana Pinto.
La patronal de los petroleros destacó en su nota los elevados niveles de seguridad y los rigurosos criterios de identificación de riesgos ambientales y mitigación con que operan las empresas del país, que producen 3,5 millones de barriles de crudo por día.
Destacó igualmente que el sector supone casi el 15% del PIB de Brasil y que prevé generar hasta 445.000 empleos anuales en la próxima década, en la que recibirá inversiones por 180.000 millones de dólares.
"El descubrimiento de nuevas fronteras exploratorias es necesario para la reposición de las reservas que están declinando y atraerá aún más inversión al país", agrega la patronal.
galan
02/05/2023