La Comisión Europea está trabajando una nueva Comunicación en materia energética para dar a conocer las conclusiones del mandato del Consejo Europeo de valorar el actual modelo de mercado eléctrico europeo.
Según el borrador al que ha tenido acceso El Periódico de la Energía, titulado "Intervenciones del mercado de energía a corto plazo y diseño del mercado de electricidad a largo plazo", a primera vista, Bruselas confía en el informe ACER y ve bien el actual sistema de fijación de precios en los mercados mayioristas de electricidad.
"La Comisión considera que, sobre la base del informe ACER y su divulgación a las partes interesadas, el diseño actual del mercado de la electricidad ofrece un mercado eficiente y bien integrado, lo que permite a Europa cosechar todos los beneficios económicos de un mercado único de la energía, garantizando la seguridad del suministro y el mantenimiento del proceso de descarbonización".
Pero a pesar de ello y a que todo el sector eléctrico se oponga a intervenir el mercado, la Comisión ve con buenos ojos poder llevar a cabo medidas intervencionistas como el límite al precio del gas para la generación de electricidad que han aprobado recientemente España y Portugal.
Requisitos
Y es que Bruselas dejará al resto de socios de la UE poder llevar a cabo esta medida si lo hace de manera temporal y cumple una serie de requisitos. Entre ellos, está negociarlo con todos los mercados o estados miembro que se vean afectados.
Además, no podrá cortar ni rebajar el suministro de electricidad transfronterizo. Estará obligado a una compensación a la generación con gas a la que tendrá que vigilar para que no aumente demasiado.
Tampoco puede hacer dicha medida que aumente mucho la demanda porque entonces se quemarán más combustibles fósiles y se podría aumentar las emisiones.
En el caso español será complicado cumplir todo ya que rebajar los precios hará que se exporte más electricidad a Francia todos los días y eso hace aumentar la demanda.
Por otro lado, tendrá que respetar todos los contratos de luz cuyo precio ya este fijado con anterioridad
Otras medidas a corto: los windfall
También dejará la Comisión Europea que los Estados Miembro que quieran puedan resolver el problema de los altos precios de la electricidad aplicando una tasa a los windfall profits o beneficios caídos del cielo.
Bruselas entiende que esta medida, también transitoria, podría ser necesaria para algunos miembros de la UE que se ven afectados por la subida del gas en su mercado eléctrico.
Según el borrador de la Comunicación, los ingresos obtenidos por esta medida podrían ir destinados para favorecer a los consumidores vulnerables.
Además, esta medida se podrá extender hasta mayo de 2023. En un principio, sólo se permitió hacerlo hasta el próximo 30 de junio, tal y como aprobó el Gobierno de España.
Medidas a largo plazo
En el borrador la Comisión Europea insiste en dar algunas herramientas para preparar mejor el mercado eléctrico a episodios de alta volatilidad como los actuales.
Para prevenir y llevar mejor futuros capítulos de altos precios, Bruselas considera que hay que trabajar en varias líneas de actuación. Estas son:
- Protección a los consumidores vulnerables. El diseño del mercado de la electricidad podría incluir formas de garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a la energía, lo que incluye garantizar que ciertos consumidores tengan acceso a un nivel mínimo de demanda de electricidad a un precio razonable, independientemente de la situación en los mercados de la electricidad o el costo de los combustibles fósiles.
- Más coberturas y contratación a medio y largo plazo. Una forma de mitigar el riesgo de aumentos futuros en los precios de la energía es la cobertura. La forma más sencilla de cobertura es participar en un acuerdo de suministro a un precio fijo. Hay mercados establecidos en toda la UE donde la electricidad se puede comercializar para entrega a plazo. Sin embargo, algunos de esos mercados carecen de liquidez, concretamente para contratos a más largo plazo, por lo que es posible que se requieran intervenciones regulatorias para mejorar la liquidez en los mercados de energía a plazo.
- Garantizar inversiones en energías limpias. Para ello Bruselas recomienda llevar a cabo mecanismos de capacidad para una mayor integración de energías renovables. Además, Bruselas apuesta por contratos por diferencia (CfDs) bidireccionales, en virtud de los cuales el operador recibe un complemento cuando los precios de mercado son bajos y lo devuelve cuando son altos. Los CfD bien diseñados pueden contribuir a que la formación del precio de la electricidad sea más independiente del costo del gas.
- Mejorar la respuesta de la demanda y la flexibilidad. Los recursos de flexibilidad, como la respuesta del lado de la demanda y el almacenamiento serán claves para sobrellevar capítulos de altos precios energéticos. A ello hay que sumar una mayor apuesta por el autoconsumo solar así como por la adopción de un nuevo código de red.
- Caminar hacia mercados más locales con la introducción de precios nodales. Cuanto mayor sea el aumento de las energías renovables en el mix energético, más importantes se espera que sean estos beneficios. Un estudio de 2020 anticipa costos del sistema 10% más altos para 2040 en ausencia de precios de ubicación. Los beneficios ya podrían ser mayores hoy en día dadas las rentas inframarginales más altas que se obtienen en el contexto de los altos precios del gas.
- Mayor transparencia para prevenir. El marco REMIT podría revisarse para explorar el alcance de mitigar de manera más efectiva los riesgos de abuso de mercado mediante una mayor transparencia del mercado, una mayor calidad y recopilación de datos de mercado, así como una mejor aplicación a nivel de la UE.
En definitiva, la Comisión Europea prepara el mercado eléctrico del futuro.
Miguel
17/05/2022