La vicepresidenta de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha asegurado "ignorar" la propuesta planteada por la vicepresidenta de Trabajo, Yolanda Díaz, de aplicar un recargo de diez puntos en el Impuesto sobre Sociedades a las grandes compañías eléctricas.
La ministra ha asegurado que "todo el Gobierno está alineado" con el objetivo de asegurar "un reparto justo" del impacto de la guerra
"Ignoro estas propuestas. A veces lo que veo en medios no se corresponde con el trabajo serio, responsable y técnico que se está haciendo dentro del Gobierno", ha dicho, preguntada por los medios de comunicación acerca de esta propuesta, durante su intervención por videoconferencia en el Curso de verano de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander.
El impuesto a las eléctricas en juego
Calviño ha asegurado que, en todo caso, "todo el Gobierno está alineado" con el objetivo de asegurar "un reparto justo" del impacto de la guerra en Ucrania, y entre ellas, ha dicho, está "gravar o evitar los beneficios extraordinarios de las eléctricas".
La vicepresidenta económica ha señalado que el Gobierno ya ha abordado este tipo de medidas aprobando cambios legales en el mercado eléctrico --la minoración de los ingresos por el sobrecoste del gas o el recientemente aprobado tope al gas en la generación de precios--.
"Vamos a seguir haciéndolo. Lo que tenemos que hacer es encontrar el instrumento legal, fiscal o financiero para lograr ese objetivo", ha aseverado.
Sin embargo, preguntada hasta en dos ocasiones por si el próximo decreto ley contendrá este recargo fiscal que ha defendido Unidas Podemos, ha dicho no conocer la propuesta: "A veces ves cuestiones en los medios que no se corresponden con lo que sucede con el trabajo responsable y serio que venimos desarrollando".
La inflación
La vicepresidenta primera del Gobierno no ha dado más detalles del decreto ley que el Ejecutivo tiene previsto aprobar este sábado en un Consejo de Ministros extraordinario para prorrogar el plan de respuesta económica a la guerra en Ucrania: "Extenderá algunas medidas, ampliará otras y añadirá otras", ha zanjado.
Calviño ha reconocido que las últimas noticias relacionadas con esta crisis "no son positivas", con un corte de los suministros energéticos procedentes de Rusia que han empujado al alza el gas en los mercados de futuros un 40% en apenas una semana.
"Esto nos lleva a trabajar en un nuevo escenario de inflación más alta, durante más tiempo", ha abundado Calviño, subrayando que "una guerra a las puertas de Europa no es una broma".
¿Desgaste del Gobierno?
Por otro lado, preguntada por las recientes dimisiones en el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones --los dos secretarios de Estado de José Luis Escrivá han renunciado a su cargo en apenas 24 horas--, Calviño ha asegurado que "se trata de cambios que ya estaban previstos" y ha dicho estar "segura" de que las personas que asumen el cargo "van a hacer un trabajo excelente".
En este sentido, ha destacado cómo, pese a que desde la oposición parlamentaria se asegure que en el banco azul del Gobierno "se está muy cómodo", esta afirmación demuestra "falta de conocimiento", pues estos últimos años de gestión de la pandemia, la erupción del volcán de La Palma, y ahora la guerra en Ucrania, "han exigido del Gobierno un trabajo intenso, toma de decisiones difíciles y una dedicación extraordinaria para defender y proteger los intereses de los españoles":
"Se trata de un trabajo difícil y no debe sorprender que los equipos cambien. El ritmo de trabajo ha sido extraordinario para toda la Administración", ha dicho, reconociendo el trabajo de todos los servidores públicos que, ha subrayado "están dando lo mejor de sí".
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