La energía solar térmica lleva entre nosotros varias décadas. Sus usos son múltiples, desde el agua caliente de las casas, hasta la generación de electricidad. Es en este punto, donde la energía termosolar ha significado mucho para España siendo la punta de lanza de esta tecnología verde.
España ha sido y es la energía termosolar en el mundo. España es hoy líder mundial tanto en potencia instalada como en capacidad tecnológica, y las empresas del sector solar termoeléctrico están comenzando a participar en ambiciosos proyectos en muchas regiones del mundo (EEUU, Sudáfrica, Oriente Medio, China, India, Australia … ). Un liderazgo que se ha logrado gracias a un esfuerzo continuado en I+D dentro del sector ya desde finales de los años 70, y que perdura hasta hoy.
Actualmente, España cuenta con 50 centrales en operación que suman 2.300 MW de potencia, siendo el mercado con mayor capacidad operativa del mundo.
Pero todas se pusieron en marcha entre 2007 y 2013, al calor de las subvenciones. Nueve años después la termosolar sigue así porque ha sido incapaz de expandirse como sí han hecho eólica y fotovoltaica y por tanto no han conseguido reducir los costes y obtener la paridad de red.
Eso ha hecho que la termosolar creciese muy poco no solo en España sino en todo el mundo. Sus altos costes han acabado por ser la causa de su muerte.
Aun así las empresas españolas han seguido continuando trabajando y tratando de mejorar la tecnologíay se ha hecho.
Subasta
Por fin, en 2022 parecía que podría resucitar la termosolar en España tras casi una década parada. El Gobierno español puso en marcha la semana pasada una subasta. Pero resultó ser un desastre.
No se adjudicó ni un sólo megavatio porque los ofertantes no pujaron muy fuerte. No hay excesiva competencia y el coste de la termosolar sigue siendo bastante alto.
Ha habido un cruce de acusaciones del por qué de este fracaso. El Gobierno cree que las empresas han inflado sus precios aprovechando las circunstancias de mercado (coste de materias primas, inflación, etc). Acusan al sector de que no se ha querido tener en cuenta que es un contrato a 15 años vista y que por tanto no se van a dar precios tan altos en el futuro.
Por parte del sector creen que el Gobierno ha establecido muy bajo el precio de reserva o de corte para poder optar a la adjudicación, pero como se desconoce ese precio es complicado saberlo. El Gobierno afirma que el precio, que realmente lo impone la CNMC, es bastante alto.
En definitiva, por una cosa o la otra, la casa sin barrer. España se queda sin tener, de momento, más termosolar, tecnología que ayudaría, gracias al almacenamiento, a integrar otras renovables.
Hay empresas que quieren instalar y además hibridada con fotovoltaica. Solo el tiempo quitará o dará la razón de si el momento actual no era el adecuado para lanzar una subasta.
El caso es que de momento, nada más de termosolar y eso que en el sector creen que el sistema más barato de almacenamiento es el térmico con plantas termosolares, más económico que fotovoltaica con baterías o incluso fotovoltaica y térmico.
Dabama
31/10/2022