Ya son muchas las multinacionales que se quieren apuntar a una economía descarbonizada y que reconocen la necesidad de actuar por el clima. Y para reconocer su esfuerzo hace unos años surgió RE100, una ambiciosa iniciativa mundial integrada por algunos de los mayores negocios del planeta que se han comprometido a utilizar un 100% de energía renovable. Las empresas se benefician además de una reducción de los riesgos relacionados con la seguridad energética y logran ahorros financieros a largo plazo.
Pero ¿cuáles son los bancos que se han incorporado a la lista?JPMorgan Chase es el último de una no muy larga lista de grandes instituciones financieras que se han comprometido con las energías renovables. En total, cuatro bancos de EEUU y el resto europeos hasta sumar trece quieren destacar por su compromiso con el medio ambiente al unirse a la RE100. Dos de ellos son españoles, Bankia y Caixabank, un honor que ningún otro país europeo puede disputar.
Estos son los diez más importantes:
Este pasado mes de julio, JPMorgan Chase acaba de anunciar que quiere abastecer de electricidad renovable a sus sedes de todo el mundo en 2020, y mientras tanto, financiará proyectos limpios destinando hasta 200.000 millones de dólares de aquí a 2025. "Los negocios deben desempeñar un papel de liderazgo en la creación de soluciones que protejan el medio ambiente mientras crece la economía", ha dicho Jamie Dimon, presidente y director general de JPMorgan Chase.
En septiembre pasado Bank of America se unió al RE100. En su anuncio, la empresa reveló una serie de objetivos ambientales, como la compra del 100% de su electricidad de fuentes renovables, la reducción del uso de energía en un 40% y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero hasta en un 50%.
Bankia se propuso en 2016 que toda la electricidad utilizada por sus sucursales y sus oficinas centrales tuviera su origen en fuentes renovables. La entidad española asegura que gracias a ello ha evitado la emisión de 36.236 toneladas de dióxido de carbono. Se unió a la RE100 a principios de 2017.
CaixaBank se convirtió en miembro de la RE100 en junio de 2016, porque había decidido que quería obtener el 100% de su electricidad de fuentes renovables en tres años, en 2019. El banco también pretende ser neutro en carbono para el 2018.
El segundo banco más grande de Alemania, Commerzbank, dice que está trabajando para conseguir que su actividad sea "neutral al clima", es decir, que sus emisiones de dióxido de carbono al ambiente y sus acciones para reducirlo tienen como suma cero. Pero su objetivo es reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 70%.
La entidad estadounidense Amalgamated Bank se comprometió a que su consumo eléctrico iba a ser 100% renovable cuando anunció que se uniría a la RE100 en septiembre de 2016. "Tenemos que ser honestos, vivimos una creciente crisis ambiental que se está extendiendo y ya no miraremos a otro lado", dijo Keith Mestrich, presidente y CEO de Amalgamated Bank, "como una industria que se enorgullece de la innovación y la acción audaz, todos debemos ser líderes y tomar medidas reales para cambiar nuestro rumbo".
La entidad danesa Danske Bank se unió a la RE100 a principios de 2017. La financiera asegura que sus emisiones de CO2 son neutrales desde 2009, y todo el consumo de electricidad de sus instalaciones proviene de fuentes de energía renovable. Además, pretende reducir su consumo de energía en un 15% entre 2014 y 2018.
Goldman Sachs se unió a la RE100 en 2015, y se comprometió a que su energía fuera 100% renovable en 2020. El gigante de Wall Street ha descrito el cambio climático como "uno de los desafíos ambientales más significativos del siglo XXI".
Para el año 2020, el grupo holandés ING quiere que todos los edificios en los que opera se abastezcan de electricidad 100% renovable. El banco también quiere reducir su huella de CO2, residuos y agua en un 20% también en 2020, pero asegura que tiene la certificación de ser 'carbono neutro' desde 2007.
La sueca Nordea Bank se unió a la RE100 en 2015. El banco se centra en una serie de objetivos para reducir su impacto ambiental, desde reducir el consumo de energía y agua en sus oficinas centrales y sucursales hasta reducir los residuos y aumentar la cantidad de alimentos orgánicos ofrecidos en sus comedores.
Los otros tres bancos que completan el listado de entidades financieras adscritas a REN100 son la estadounidense TD Bank, la francesa Crédit Agricole Group y la noruega DNB.
La primera se unió en 2016 y dice que en 2010 se convirtió en "la primera institución financiera con sede en Norteamérica que logró el estado neutral de carbono". El banco quiere gestionar su huella medioambiental al: reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero, reducir el uso de papel, y aumentar la eficiencia energética.
En el caso de Crédit Agricole Group, uno de los grupos bancarios más grandes de Europa y el prestamista de la economía francesa, se fijó el objetivo de utilizar el 100% de electricidad renovable en sus operaciones globales a finales de 2016.
Y por último, la noruega, el mayor grupo de servicios financieros de Noruega, ya compra certificados de electricidad renovable equivalentes al 100% del consumo de electricidad de la empresa, y se une a RE100 con un objetivo de ser alimentado por certificados locales de electricidad renovable para 2020.
Elia
08/01/2020