La eléctrica portuguesa EDP aseguró hoy que hizo una "gestión responsable" de los embalses en el país, algunos de los cuales presentan niveles históricamente bajos, y anticipó que las medidas adoptadas por el Gobierno para combatir la sequía tendrán impacto en sus cuentas.
"Operamos las centrales dentro de los parámetros normales. Hemos hecho una gestión responsable", aseguró su consejero delegado, Miguel Stilwell de Andrade, en la presentación de los resultados de 2021, donde resumió la situación: "Pura y simplemente, no hay agua".
La sequía llevó al Gobierno portugués a tomar medidas y prohibió la producción de electricidad en cinco embalses de la empresa, lo que tendrá impacto en sus cuentas, admitió.
"Obviamente que tiene impacto", dijo Stilwell, que no avanzó cifras y señaló que serán conocidas cuando se divulguen las cuentas del primer trimestre de 2022.
En lo que va de año, explicó, la falta de lluvia ya ha provocado que se produzcan 2 teravatios menos de energía.
"En enero llovió un tercio de lo que típicamente llueve y en febrero un quinto", recordó.
La falta de lluvia ya afectó los resultados de 2021 de EDP, especialmente en el cuarto trimestre, cuando los recursos hídricos en la península ibérica fueron un 57 % inferiores a la media histórica.
EDP obtuvo un beneficio de 657 millones de euros en 2021, un 18 % menos que el año anterior, por impactos extraordinarios, como provisiones asociadas a la cartera de centrales térmicas en el mercado ibérico.
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