La asombrosa cifra de 619 gigavatios (GW) de energía solar, eólica y de almacenamiento entrará en funcionamiento entre 2023 y 2030 en EEUU, según las previsiones de BloombergNEF, lo que supone un aumento de 19 GW respecto a las perspectivas anteriores. Si bien las limitaciones estructurales, como la concesión de permisos y las conexiones a la red, y el mayor coste del capital amenazan la expansión, BNEF espera que esto se vea compensado 4por el descenso de los costes de los equipos, el crecimiento de la carga y la fuerte demanda de nuevo suministro de energía limpia.
Los objetivos y planes de adquisición de las empresas eléctricas son un motor clave de la construcción de nueva energía limpia en Estados Unidos. Muchas empresas de servicios públicos también han incluido objetivos de almacenamiento de energía, impulsados por las crecientes necesidades de fiabilidad, lo que contribuirá a que el mercado del almacenamiento despegue fuera de California y Texas.
El aumento del coste de la deuda está reduciendo la rentabilidad a largo plazo de los proyectos solares y eólicos, y los inversores están limitando en gran medida las operaciones a aquellos proyectos que tienen asegurada la conexión a la red. La prórroga y ampliación de los créditos fiscales de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) compensará en parte el aumento de los tipos de interés. Algunas de las nuevas subvenciones y normas, como la opción de vender créditos fiscales, si se aplican con cuidado, harán incluso muy lucrativos algunos proyectos. Estados Unidos va camino de alcanzar niveles récord de inversión en energía solar este año, ya que una gran cantidad de capital persigue proyectos.
En su mayor parte, los promotores han podido repercutir los costes más elevados en el comprador final de electricidad en forma de precios más altos de los contratos de compraventa de energía (PPA). Pero los compradores de electricidad se oponen cada vez más al aumento de los precios de los PPA, sobre todo porque el mercado espera que los precios del gas sean más bajos en el futuro debido a los altos niveles de existencias.
La energía solar domina las previsiones hasta 2030
A pesar de los mayores costes de capital, los cuellos de botella en la conexión a la red y los riesgos de restricciones, el auge de la energía solar en EEUU está en marcha. Nuestras previsiones han aumentado en 12 GW para el periodo 2023-2030 en comparación con nuestras perspectivas anteriores. La mayor parte del aumento corresponderá a la energía solar doméstica, que superará las limitaciones de financiación gracias a la disminución de los costes a largo plazo.
Las instalaciones eólicas terrestres descenderán por tercer año consecutivo en 2023 debido principalmente a la escasez de proyectos en cartera. La certidumbre de los créditos fiscales de la Ley de Reducción de la Inflación (IRA) y la reducción de las limitaciones de transmisión y permisos impulsarán el crecimiento de la energía eólica terrestre más adelante en la década. La inflación y los tipos de interés elevados han frenado el crecimiento de la eólica marina, con unos 3,2 GW de proyectos que han cancelado sus contratos de compra este año. La construcción total anual de energía eólica superará los 11 GW en 2025 y ascenderá a 23 GW en 2030.
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