En enero de 2016, Forestalia, un grupo casi desconocido para el sector de las renovables, se presentaba en la primera subasta celebrada después de años de inactividad y ganaba 300 MW de los 500 MW eólicos ofertados. Pero lo más difícil no era ganar, sino conseguir la financiación necesaria para llevarlo a cabo.
Pero al grupo controlado por el aragonés Fernando Samper no le han faltado recursos para ello. En mayo pasado, cuando volvió a ser el máximo ganador de la segunda subasta de renovables, con la adjudicación de 1.200 MW, el fondo de capital riesgo más poderoso e influyente del mundo, el estadounidense BlackRock, anunciaba que entraba en el accionariado de Forestalia, un apoyo moral y económico muy importante, ya que supone parte de la inyección millonaria que necesita la compañía aragonesa para afrontar el desarrollo de tantos megavatios.
Pero no era suficiente, y ahora el Banco Europeo de Inversiones (BEI) anuncia que está estudiando financiar a Forestalia. Podría financiar 165 millones de euros para un paquete de financiación total de 298 millones de euros. Se trata de los nueve parques eólicos que integrarían el proyecto Goya en la región aragonesa, que sumarían los 300 MW ganados en la primera subasta.
El banco reconoce que sólo dos de los nueve parques han recibido la Declaración de Impacto Ambiental, pero que todavía falta por realizar algunos estudios por su parte, como evaluar los planes de una línea eléctrica de 28km 220kV que deben tener para conectar algunos de los parques eólicos a la red. Aún así, la entidad europea señala que concederá esa financiación a finales de este año.
El BEI espera que su financiación para esta operación tenga un importante efecto de aceleración y demostración, ya que será uno de los primeros proyectos de energía renovable greenfield financiados en España tras la moratoria de 2012 y tras el nuevo marco regulatorio que entró en vigor en 2014. Además, contribuirá a la consecución de los objetivos españoles 2020 en materia de energías renovables y a la reducción de las emisiones de CO2.
De hecho, hay más en la lista de espera. Entre los proyectos a valorar se encuentra la planta fotovoltaica de X-Elio en Lorca que espera su momento desde 2015. El proyecto comprende la construcción y operación de 386 MW de potencia. El importe solicitado es de 196 millones de euros de un total de 302, pero todavía tiene que solucionar algunos trámites para acceder a ese crédito.
La convocatoria de subastas de renovables en España le ha gustado al BEI. Después de años desaparecido para el sector en España, quiere participar en el resurgimiento de la industria renovable en España. Según dijo en mayo pasado Vicent Girard, Loan Officer del BEI, en unas jornadas organizadas por UNEF, “nuestro objetivo es apoyar a las energías renovables y a los proyectos que luchen contra el cambio climático en España, aunque nuestros principales clientes son los grandes proyectos”.
El BEI es la entidad de titularidad conjunta de los países de la UE, y aunque su representante reconoce que “nos importa los flujos de caja y los retornos financieros y que respetamos los criterios de riesgo que como banco podemos asumir, nuestras condiciones respecto a la banca privada son más benignas, a más largo plazo, a unos 25 años, además contamos con los fondos Junckers“.
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