El Congreso pide una auditoría de Bruselas sobre el apagón, con abstención de Junts y el Gobierno en contra

El Pleno del Congreso de los Diputados ha aprobado una iniciativa del PP con la que insta al Gobierno a pedir a la Comisión Europea una auditoría independiente sobre el apagón que afectó a la Península Ibérica el 28 de abril, un encargo que ha salido adelante gracias al apoyo de Vox y UPN y la abstención de Junts.

En concreto, la propuesta ha salido adelante con 168 votos en contra de PSOE, Sumar, Esquerra, PNV, Bildu, Podemos, BNG y Coalición Canaria; 171 a favor de PP, Vox y UPN y las siete abstenciones de los de Carles Puigdemont.

La iniciativa insta al Ejecutivo a que pida un informe a la Agencia de Cooperación de los Reguladores de Energía de la UE de los sistemas eléctricos de los países afectados por el apagón para el esclarecimiento completo de las causas que estuvieron en el origen de esta situación.

Estrategia de Seguridad Energética Nacional

Entre las peticiones de la moción se encuentra una para elevar al Consejo de Seguridad Nacional (CSN) la propuesta de realizar y aprobar de manera urgente, en un plazo no superior a seis meses, la actualización de la Estrategia de Seguridad Energética Nacional ordenada en 2020 y no cumplida hasta ahora, contemplando la posibilidad de un cero eléctrico como el sucedido, así como los efectos de un posible cese de la operación nuclear.

También se pide aprobar "de manera urgente" los nuevos procedimientos de operación y requerimientos de protección de las instalaciones de producción y de la red, reclamados por el operador del sistema Red Eléctrica Española al gobierno.

A su vez, la Cámara Baja pide al Gobierno promover en la próxima revisión del PNIEC la introducción de criterios que tengan en cuenta las lecciones aprendidas tras gran apagón, que estará sujeta a los principios de neutralidad tecnológica, la sostenibilidad, competitividad y seguridad de suministro en igual relevancia.

Otra de las peticiones pasa por impulsar la interconexión internacional fomentando la colaboración con países vecinos para alcanzar y superar el objetivo del 15% con el resto de la UE en 2030, frente al 3% actual. También plantea establecer incentivos eficientes para la inversión en infraestructuras y equipamientos críticos para mejorar la capacidad y resiliencia de la red ante perturbaciones graves y la gestión eficiente de picos de generación renovable.