Endesa, a través de su filial de redes e-distribución, ha empezado este martes las tareas de reposición de las dos torres de alta tensión desplomadas tras el paso del temporal Bernard en la zona de las marismas del Prado en Lepe (Huelva), una tarea "compleja" para la que cuenta con la ayuda de la Unidad Militar de Emergencia (UME).
La borrasca, con vientos huracanados de más de 140 kilómetros por hora, provocó a su paso grandes desperfectos en las infraestructuras eléctricas que se han ido reponiendo a lo largo del tiempo, garantizando siempre el suministro a los clientes gracias a la estructura de la red eléctrica mallada que ha permitido dar energía por líneas alternativas, ha informado Endesa en un comunicado.
"A su paso por las marismas del Prado, el temporal provocó el desplome de dos apoyos cuya sustitución no ha sido posible hasta ahora debido a la complejidad de acceso a la zona y la necesidad de coordinación con las autoridades competentes en Medio Ambiente y Costas, que han facilitado las tramitaciones necesarias", ha explicado Clara Castillo, técnica de líneas de alta tensión en la provincia de Huelva.
Por este motivo, la sustitución de estas infraestructuras "no se está haciendo de forma tradicional con grúas, sino por aire y con el apoyo de la UME", ha indicado.
Un helicóptero
Ha sido la UME la encargada de colocar una plataforma de acceso en las marismas para que los técnicos puedan llevar a cabo los trabajos, mientras un helicóptero ha trasladado, una a una, las dos nuevas torres de alta tensión, de 20 metros de altura y 750 kilos de peso, que ha ido colocando de forma milimétrica en las ubicaciones que han quedado libres.
Cada una de estas infraestructuras soportará los 1.000 metros de línea eléctrica que permitirán conectar de nuevo la red como estaba antes del paso del temporal.
Para ello, un equipo de seis militares de la UME está trabajando, desde este martes y durante estos días, junto a Endesa y de forma coordinada, para poder facilitar el acceso de los técnicos de la compañía instalando una plataforma acuática por la que trasladarse.
Una vez queden colocadas estas torres de alta tensión, se llevará a cabo el estudio del terreno para ver su firmeza y se realizará la excavación para el anclaje y la cimentación del terreno.
Estos trabajos, que supondrán una inversión de medio millón de euros, se prolongarán a lo largo del mes de marzo y, una vez finalizados, se llevará a cabo la puesta en marcha final de la línea, que entrará en servicio en verano.
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