El Estadio Olímpico de Berlín va a generar su propia electricidad solar a través de una importante inversión que trata de impulsar tanto la seguridad climática como la transición energética urbana de Berlín hacia una energía limpia y ecológica.
A través de este proyecto Solarwatt instalará un sistema fotovoltaico de 605,25 kilovatios de potencia máxima, compuesto por 1.674 módulos fotovoltaicos, en el anillo exterior de hormigón de la cubierta del estadio. Esto producirá un total de hasta 615.000 kilovatios hora de electricidad al año, la energía suficiente para unos 205 hogares de tres personas. La electricidad alimentará los sistemas de ventilación, refrigeración e iluminación del estadio, así como otros servicios.
Este sistema fotovoltaico será la piedra angular del proyecto para conseguir un estadio climáticamente neutro, ahorrando 225 toneladas de CO2 al año. El nivel de autosuficiencia alcanzado, en forma de independencia del suministro eléctrico público, se incrementará a medio plazo mediante el uso de almacenamiento de electricidad con baterías de segunda vida.
El proveedor de sistemas fotovoltaicos, Solarwatt, suministra los módulos solares para el sistema fotovoltaico. Detlef Neuhaus, director general de Solarwatt, asegura que “la generación y el uso de la energía solar no sólo tiene un sentido absoluto desde el punto de vista ecológico, sino que la energía solar es, con mucho, la fuente de energía más económica que existe. Nuestros módulos suministran energía solar limpia de forma fiable durante varias décadas, aumentando la independencia energética del Estadio Olímpico de Berlín y proporcionando una medida de protección frente a los precios de la energía en constante aumento”.
Una de las principales ventajas para el gestor del estadio es que la inversión financiera en el sistema fotovoltaico corre a cargo de terceros, lo que constituye un importante factor de expansión de las energías renovables en las ciudades. “Para nosotros, la instalación fotovoltaica en el tejado es un paso más para conseguir que todo el recinto sea neutro en cuanto a emisiones de CO2”, explica Tipo Rohwedder, director general del Estadio Olímpico de Berlin.
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