Un documento de IEEFA publicado este año ha demostrado ser inquietantemente correcto con pronósticos de duplicar o incluso triplicar el precio del Henry Hub de EEUU y precios globales del gas más altos y extremadamente volátiles.
En enero de 2021, IEEFA advirtió que más de 50.000 millones de dólares en proyectos de energía de gas e instalaciones de importación de GNL estaban en riesgo de cancelación en Bangladesh, Pakistán y Vietnam, ya que la electricidad a gas se volvió inasequible en los mercados emergentes.
El documento advirtió que los mercados emergentes particularmente sensibles a los precios encontrarían un desafío en el próximo entorno de precios del gas, como ya se había visto en Bangladesh y Pakistán durante 2020.
El informe advirtió que los precios más altos y volátiles del GNL harán que la operación de las plantas de generación alimentadas con GNL sea más costosa e impredecible, lo que puede conducir a la subutilización de las plantas de GNL y al aumento de las tarifas de gas y electricidad para los clientes.
El documento de IEEFA también pronosticó precios del gas más altos y más volátiles durante 2021, lo que sugiere que si bien los precios del gas por contrato habían sido bajos y relativamente estables en los últimos años, “es poco probable que esto dure. Con niveles más bajos de perforación, inestabilidad financiera en la industria del petróleo y gas y bajos niveles de inversión en la industria, es probable que se acerque una nueva era de precios más altos y más volatilidad ".
Hace uno días, el indicador del precio del gas doméstico de EEUU, a partir del cual se cotizan sus crecientes exportaciones, cotizó por encima de los 5 dólares estadounidenses por millón de unidades térmicas británicas (mmbtu), un 112% más alto en lo que va de año.
El precio spot asiático, el JKM, ha subido un 106% con respecto a 2021 a 21,63 dólares estadounidenses / mmbtu y el precio europeo del gas ha subido un 270% a 19,74 dólares estadounidenses.
Precios del gas natural en Asia, Europa y EEUU
Al igual que el anterior aumento global del precio del gas, este ha dejado a los clientes luchando por suministrar electricidad doméstica.
Tanto la estatal Petrobangla de Bangladesh como Pakistán han suspendido las compras de GNL después de que las licitaciones regresaran con precios inasequibles.
La incapacidad de varios países para suministrar electricidad debido a precios excepcionalmente altos pone en duda una mayor expansión o un nuevo desarrollo de la infraestructura de importación de gas en Bangladesh, Pakistán, Vietnam e India.
Si el combustible es inasequible, ¿por qué hay planes para aumentar su uso?
Si bien los precios al contado del GNL son altos actualmente, la perspectiva de precios a medio plazo está menos clara. Los grandes aumentos en la oferta de Qatar debido al aumento de la producción tendrán un efecto deprimente en el precio, sin embargo, esto se contrarresta con cuatro tendencias generalizadas.
1.- Se está retirando capital de la industria
Tanto los fondos de pensiones como los bancos son más cautelosos a la hora de invertir o prestar a la industria del petróleo y el gas, ya que el gas ha perdido su lugar en el mix energético del futuro en el mundo. La semana pasada, la Universidad de Harvard anunció que ya no invertiría en combustibles fósiles, y se unió a una lista de casi 200 bancos y aseguradoras, administradores de activos y propietarios de importancia mundial que han anunciado su desinversión en combustibles fósiles, incluidos carbón, petróleo, GNL, gas, arenas petrolíferas y perforaciones árticas.
2.- Los clientes temen los riesgos financieros a medio plazo del gas
Los clientes ven claramente que los costos de la energía renovable continúan cayendo, lo que hace que el gas sea un combustible no competitivo. Como resultado, no se están comprometiendo con contratos de gas a largo plazo con términos de contrato comúnmente de 10 años en comparación con los términos de contrato de más de 20 años de hace solo 7 años. Los contratos más cortos y flexibles dificultan la obtención de financiación para proyectos de GNL de 30 años de duración intensiva en capital.
3.- La industria del GNL se enfrenta a los vientos en contra de la lucha climática
En la actualidad, se acepta generalmente que el gas no es un combustible de "transición" hacia sistemas de energía más limpios, sino más bien otro combustible fósil de alta emisión y uso intensivo de carbono, similar al carbón. Los precios y las tarifas del carbono, características cada vez más comunes de la economía mundial, están sofocando la capacidad del gas para competir en la producción de energía mundial.
4.- Los costos de exploración y producción están aumentando
Los mejores años de la industria del gas han quedado atrás con los campos más antiguos de menor costo que ahora se están agotando. Por ejemplo, Australia se enfrenta al declive terminal de sus campos del Estrecho de Bass con algunos pozos más nuevos que se secan .
Los costos están aumentando en el sector del gas en alta mar, ya que los nuevos pozos se encuentran en aguas más profundas, más alejadas de la costa, y generalmente tienen niveles más altos de dióxido de carbono, que es costoso de eliminar y ventilar a la atmósfera. Y en EEUU, a pesar de los precios récord del gas tanto a nivel nacional como internacional, la producción del campo Bakken Shale no se ha recuperado a los máximos anteriores a COVID y los costos del campo están aumentando, ya que se han perforado los mejores pozos de petróleo y gas.
El efecto neto de estas tendencias, según IEEFA, es que nos espera una volatilidad continua en los precios mundiales del gas con períodos de precios muy altos.
La lección para los mercados emergentes es que la inversión en activos de importación, distribución y producción de energía de gas conducirá a activos inmovilizados y pérdida de riqueza. El gas está saliendo lentamente del sistema energético mundial, estrangulado por la falta de financiación y plagado de precios volátiles.
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