El Gobierno acoge con satisfacción la reforma del mercado eléctrico de Bruselas y reconoce que no ha podido acabar con el marginalismo

El Gobierno acoge con satisfacción la propuesta de la Comisión Europea sobre la reforma del mercado eléctrico.

"Lo que hace un año se nos decía que era imposible, hoy se plasma en una propuesta legislativa que se inspira y recoge buena parte de las soluciones propuestas por España para mejorar el diseño del mercado eléctrico", aseguran fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica.

Aunque la propuesta de Bruselas también es clara con uno de los puntos clave de la propuesta de la reforma española que diseñó la catedrática de Economía Natalia Fabra. Ese punto clave era instaurar precios regulados por el Estado para la hidroeléctrica y la nuclear.

Y es que la propuesta de la Comisión obvia eso y anula esa propuesta.

"Reconocemos el ánimo constructivo de la Comisión a la hora de preservar el interés de desacoplar el del gas y el carbón del mercado marginalista -sin que por ello se elimine-, tal y como expuso España en su propuesta remitida a Bruselas el pasado enero", dicen.

Aunque sí ha tenido en cuenta Bruselas otros puntos que mencionaba el Gobierno en su propuesta.

"Consideramos positivo que la Comisión haya asumido como propia la propuesta de España de reforzar el protagonismo de los contratos a largo plazo y de capacidad. Consideramos de gran interés el respaldo que la propuesta de la Comisión realiza al impulso expresado por España para instrumentos como los contratos por diferencia (CfD) y los contratos de compra de energía (PPA)", explican las mismas fuentes.

También destaca el Gobierno español los capítulos dirigidos a los mercados de capacidad. "Los mercados de capacidad ofrecen seguridad en el suministro y permiten conseguir los objetivos de inversión en renovables garantizando el almacenamiento".

Negociación y aprobación

Además, el Gobierno se muestra convencido que en buena parte se puede llegar a buen puerto con la propuesta del mercado eléctrico.

"La UE avanzará en una reforma integral del mercado de la electricidad que ofrezca señales en el presente y en el futuro, con mercados a plazo, precios más bajos y servicios de capacidad", añaden las mismas fuentes.

"Ahora se abre un proceso de negociación en el que "España volverá a jugar un rol determinante como Presidencia del Consejo de cara a enriquecer el texto de la Comisión y generar un consenso entre los 27 Estados Miembro".

Por último, insiste en que la adopción de la reforma se pueda llevar a cabo antes de las elecciones europeas de 2024.