El hidrógeno renovable ya es más barato para el transporte pesado

El hidrógeno renovable ya se está volviendo competitivo en costos en una gama de aplicaciones de transporte pesado, según ha descubierto un nuevo análisis encargado por el gobierno, y se prevé que se convierta en la más barata de todas las fuentes de hidrógeno para mediados de siglo.

El análisis, encargado por la Clean Energy Finance Corporation, encontró que el hidrógeno verde ya se estaba acercando a la competitividad de costos para su uso en los sectores de camiones pesados, autobuses y energía remota y que para fines de la década se esperaba que fuera viable en más sectores de transporte.

El informe, elaborado por la consultora Advisian , encontró que el hidrógeno verde se estaba convirtiendo rápidamente en una alternativa viable a muchos combustibles derivados del petróleo y tenía un alto potencial para convertirse también en un competidor viable del gas fósil, según inflorma el portal de energía australiano reneweconomy.

El análisis estimó que los costos actuales del hidrógeno verde eran de alrededor de $ 3,88 dólares por kilogramo cuando se producía utilizando suministros de electricidad renovable in situ.

Pero se esperaba que este costo cayera muy por debajo de de los 2 dólares por kilogramo para 2050, si no antes, y se proyecta que el hidrógeno renovable se convierta en la fuente más barata de hidrógeno, superando al hidrógeno 'gris' y 'azul' producido con combustibles fósiles en el costo.

Advisian dijo que para 2050 o antes, es probable que el hidrógeno verde sea una fuente de energía más barata en una variedad de aplicaciones de transporte pesado, incluidos autobuses, vehículos de minería y aviación, además de ser rentable para su uso en una serie de aplicaciones industriales. tales como acerías, producción de metanol y amoníaco.

Curiosamente, la evaluación encontró que el hidrógeno verde seguiría siendo prohibitivo en costos para su uso en vehículos de pasajeros mucho más allá de 2030, y que los vehículos eléctricos probablemente ganarán un punto de apoyo temprano en un mercado para reemplazar los vehículos ICE convencionales, pero el hidrógeno verde podría surgir como un combustible altamente competitivo para vehículos ligeros de pasajeros para 2050, en gran parte gracias a la caída de los costes de las tecnologías de pilas de combustible.

El director ejecutivo de CEFC, Ian Learmonth, dijo que la agencia había encargado la investigación para proporcionar a las industrias australianas información sobre las oportunidades que crea el hidrógeno verde.

“Existe un enorme entusiasmo en torno al potencial de crear hidrógeno verde para ofrecer una fuente de energía más limpia y duradera. Al igual que con cualquier nueva tecnología, los costos disminuirán con el tiempo ”, dijo Learmonth.

“El propósito de este análisis es brindar a los participantes e inversores de la industria una comprensión de la economía potencial de los usos del hidrógeno en el contexto australiano, incluidos los posibles primeros usuarios. Nuestra experiencia en el desarrollo de los sectores solar y eólico muestra que los precios bajan rápidamente a medida que una nueva industria alcanza escala y competencia técnica. Es alentador ver una trayectoria similar para el apasionante sector del hidrógeno ”.

Advisian identificó tres tendencias clave que impulsaban la competitividad de costos del hidrógeno verde. Los dos primeros son relativamente evidentes: la caída de los costos de las tecnologías de electrolizadores y la caída de los costos de los suministros de electricidad renovable.

La tercera tendencia estaba relacionada con las mejoras necesarias en los costos de construcción de las instalaciones de hidrógeno y las mejoras que pueden lograrse mediante eficiencias operativas. Es probable que tales mejoras solo se logren a través de la experiencia del despliegue en el mundo real de proyectos de hidrógeno verde.

Advisian también identificó tres áreas en las que el hidrógeno verde tenía un potencial económico significativo, en particular para convertirse en una parte importante de la economía australiana.

Estos incluyeron el desplazamiento de combustibles derivados del petróleo, incluido el uso de hidrógeno verde en los sectores del transporte, la sustitución del gas fósil por hidrógeno renovable y el creciente mercado de exportación de hidrógeno a los mercados extranjeros.