El mecanismo por el que se compensarán a las compañías eléctricas propietarias de las centrales de generación fósil (ciclos combinados, cogeneración y carbón) al establecer un límite al precio de sus ofertas en el mercado mayorista recaerá sobre toda la demanda, es decir, sobre todos los consumidores.
Tras estar estudiando varias opciones el Gobierno para ver cómo se podría obtener mayor beneficio de cara a los consumidores, al final la medida que se elevará a Bruselas es la menos buena para los consumidores eléctricos españoles.
Y es que la clave de todo está en la posibilidad de generar déficit en las cuentas del sistema eléctrico. De esta manera, Bruselas se ha negado a poder aumentar la deuda y es por ello que serán finalmente los consumidores los que acaben pagando la compensación y no otros mecanismos con los que obtener un mayor ahorro directo.
Aún así, fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica aseguran que se seguirá viendo un ahorro neto para los consumidores, no tanto como el que esperaba obtener el Gobierno. Como la compensación es sólo para estas tecnologías, que alcanzan más del 30% de la generación actual, se obtendría un cierto beneficio final.
Es por ello que ahora la lucha del Gobierno es tratar de convencer a Bruselas con un tope al precio del gas que ronde los 30 €/MWh y que en el peor de los casos se quede en los 50 €/MWh, de tal forma que el precio en el mercado mayorista de la electricidad se quede en el entorno de los 110-120 €/MWh en el peor de los casos. Ahora el pool está por encima de los 230 €/MWh.
Ayer las vicepresidentas Calviño y Ribera aseguraron que el objetivo es tratar de conseguir el precio más barato posible para limitar el gas, aunque están en negociaciones con Bruselas.
Tal y como contó este diario, el Gobierno también trabaja en la creación de una subasta ad hoc como mecanismo en frontera para no desconectarse del sistema eléctrico europeo y no distorsionar así el mercado único.
A ello, le sumará otra subasta con el límite de las ofertas de la generación fósil.
La propuesta se presentará esta misma semana y se espera poder aprobarla a finales de abril o primeros de mayo siempre y cuando se obtenga el visto bueno de la Comisión Europea. Esta medida se podría extender sólo hasta el 30 de junio.
Miguel
30/03/2022