Se dispara el autoconsumo en España. El RD 244/2019 ha abierto la puerta a cientos de instalaciones que estaban esperando la normativa para poder superar la barrera de los trámites administrativos y ponerlos en marcha. En 2018 se instalaron en España 261,7 MW de nueva potencia fotovoltaica, de los cuales el 90%, 235,7 MW, eran proyectos de autoconsumo, pero en los próximos meses se espera que esa capacidad se doble hasta superar los 400 MW.
"Una de las razones de este incremento tan significativo es que muchos de esos proyectos ya se habían iniciado a mediados del año pasado pero los trámites administrativos estaban retrasándoles una media de entre seis y nueve meses", explica José Donoso, director general de UNEF, "pero ahora, de repente, con la nueva normativa, se abre la compuerta y esperamos que en breve estén ya todos operativos".
A los grandes proyectos solares que se están instalando por toda España se le van a sumar cientos de instalaciones de autoconsumo que impulsarán aún más la fotovoltaica en nuestro país. Solo en 2018 se registró un aumento del 94% con respecto a los 135 MW instalados en 2017 y un importante crecimiento frente a los 55 MW registrados en 2016 y los 49 MW de 2015. En 2019, la cifra será mucho más cuantiosa.
"Solo en los próximos tres meses va a haber mucho movimiento de empresas instaladoras", añade Donoso, "y esto solo es el principio".
Los trámites administrativos eran un auténtico lastre no solo para grandes instalaciones sino también para las pequeñas, "parecía que era una tramitación hecha para que no saliera adelante ningún proyecto", puntualiza.
El año 2019 se espera que finalizará con un resultado extraordinario. Y no solo es como consecuencia del RD de Autoconsumo, también algunos ayuntamientos y comunidades autónomas están favoreciendo esta aceleración. Es el caso, por ejemplo, de las ayudas que ha aprobado recientemente el Ayuntamiento de Madrid, que bonificará el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) a todos los edificios que incorporen paneles solares, con una bonificación máxima del 50% durante tres ejercicios, hasta el máximo del 60% del coste de la instalación. También se bonificará el 95% del Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) correspondiente a las obras para la instalación de paneles solares.
"Estas ayudas han despertado mucho interés en la ciudad de Madrid, aunque lo que va a sumar más número de megavatios vendrá de proyectos empresariales. La normativa es un modelo de libre mercado y los pequeños proyectos domésticos son menos atractivos si no hay subvenciones", señala el responsable de UNEF.
También la Comunidad de Murcia ha destinado 4,5 millones de euros en ayudas para mejorar la eficiencia energética de las viviendas, de los cuales 300.000 serán para la instalación de placas solares fotovoltaicas en los hogares. Es su Plan Renove 2019, en el que se subvencionará hasta el 50% del coste de la instalación. El plan va destinado a instalaciones con una potencia nominal de hasta 10 kW. No se distinguen entre edificaciones conectadas a la red eléctrica o aisladas y no distingue entre las que puedan incluir o no baterías.
Los sectores donde se espera una mayor revolución son el sector agrario, las pymes y el sector terciario (colegios, universidades, hospitales, centros comerciales...). "Una instalación doméstica tiene un coste de entre 4.000 y 6.000 euros y aunque no es un precio prohibitivo, si se echan las cuentas para ver su rentabilidad aún no salen los números, pero hay muchas personas concienciadas y también invertirán en ello".
Pero para la explosión del autoconsumo aún queda una barrera más por derribar: la conexión y el acceso a redes. "Es el principal cuello de botella porque deben estar preparadas para la incorporación de tanta capacidad renovable. Aunque en el PNIEC lo contempla, su construcción conlleva unos plazos demasiado dilatados en el tiempo, de hasta siete años, por eso habrá que buscar fórmulas que agilicen su desarrollo", añade José Donoso.
Una de las opciones es el desarrollo de la generación distribuida "que redistribuya las cargas de la red, pero antes de eso habrá que saber cuáles son las prioridades para ello", concluye.
Superar el 8% de la capacidad total de electricidad
La normativa también ha incluido lo aprobado en la Directiva de Renovables de la UE del pasado mes de junio, que aunque prohíbe todo tipo de cargos o tasas sobre la energía producida en las instalaciones de autoconsumo solar fotovoltaico y establece el derecho a poder recibir remuneración por la energía generada que se vierte a la red eléctrica, incluye una exención. Esta prohibición solo está garantizado hasta diciembre de 2026.
Si entonces la cuota de autoconsumo ha superado el 8% de la capacidad total de electricidad instalada, el regulador deberá hacer un análisis de mercado, y si la conclusión es que la sostenibilidad del sistema está en riesgo, podría introducirse algún tipo de "impuesto al sol".
"Que el autoconsumo suponga el 8% de la capacidad total instalada en 2026 supondría que para esa fecha se tendrían que haber instalado unos 8.000 MW", explica Donoso, "es difícil hacer un pronóstico para ese plazo pero no es probable que se alcancen. Para ello se tendrían que instalar una media de 1.000 MW cada año sin olvidar que las redes deberán adecuarse al mismo ritmo que ese crecimiento".
Dabama
09/04/2019