El sector del petróleo y el gas del Mar del Norte despega con el aumento de la producción y las inversiones

Noruega y el Reino Unido han superado los retos recientes y van camino de alcanzar hitos significativos gracias al notable aumento de las inversiones, el éxito de las exploraciones y la producción. La sólida producción de petróleo y gas de la región también está proporcionando recursos indispensables a Europa y al resto del mundo que navega por la transición energética.

Se espera que las inversiones en la industria noruega del petróleo y el gas alcancen un récord de 225.000 millones de coronas noruegas (21.000 millones de dólares) en 2023. En los últimos años se han aprobado varios proyectos clave, impulsados por el régimen fiscal temporal del país, que se introdujo para incentivar el gasto en la plataforma continental noruega.

“Con una impresionante tasa de crecimiento este año, se prevé que las inversiones totales en la industria noruega del petróleo y el gas superen el récord establecido en 2013, cuando las inversiones totales alcanzaron unos 205.000 millones de coronas noruegas (19.000 millones de dólares). Se espera que las inversiones en 2023 alcancen un nuevo máximo histórico, y este aumento significativo de la inversión marcaría un nuevo hito en el sector del petróleo y el gas en Noruega”, dice Emil Varre Sandoy, vicepresidente de exploración y producción de Rystad Energy.

Este aumento de la inversión es una evolución positiva tras varios años de vacas flacas en la industria y será especialmente bien acogido por el sector de servicios petroleros. Esta inversión en el sector es esencial para mantener una industria de servicios fuerte mientras experimenta una transición gradual hacia fuentes de energía alternativas.

A pesar de un descenso de casi el 15%, desde un máximo de casi 4,6 millones de barriles equivalentes de petróleo al día (boepd) en 2004, la producción noruega de petróleo y gas está llamada a aumentar de nuevo. De aquí a 2025, la producción podría volver a alcanzar niveles máximos gracias a una mayor concentración en la producción de gas y a los nuevos proyectos en tramitación. Estos volúmenes se producirán con una de las huellas de CO2 más bajas del mundo y reducirán la dependencia europea de los hidrocarburos rusos.

Las inversiones en petróleo y gas en el Reino Unido no se han recuperado del mismo modo que en Noruega. Se espera que en 2023 las inversiones sean un 75% inferiores a las de 2013, cuando alcanzaron un máximo de casi 18.000 millones de libras (22.700 millones de dólares). Sin embargo, con muchos proyectos en cartera, el año que viene podría ser el de mayor número de proyectos aprobados en una década. Mientras que en el Reino Unido se autorizan una media de tres a cinco proyectos al año, en 2024 podrían autorizarse hasta 14 nuevos yacimientos de petróleo y gas.

“Los tres proyectos de mayor envergadura son Rosebank, Cambo y Clair Phase 3. Si se aprueban estos grandes proyectos, 2024 podría marcar la mayor actividad sancionadora desde 2013, con unos 9.500 millones de libras (12.000 millones de dólares) en futuras inversiones”, dijo Sonya Boodoo, analista senior de upstream, Rystad Energy.

Pocas medidas de actividad son más cíclicas que la actividad de exploración. En 2014, se perforaron 57 nuevos pozos de exploración de petróleo y gas en Noruega. Solo dos años después, el recuento cayó a 27 a medida que el precio del petróleo se desplomaba en 2015 y 2016. La actividad aumentó en 2018 y 2019, antes de caer de nuevo en 2020 debido a Covid-19 y a los bajos precios del petróleo.

Este año, se espera que el número de pozos de exploración alcance los 35 y se prevé que crezca hasta los 36 el año que viene. También ha sido un buen año para los nuevos descubrimientos, con volúmenes similares a los del año pasado ya descubiertos, a pesar de que hasta la fecha solo se ha completado aproximadamente la mitad de los pozos previstos para 2023.