La sostenibilidad y la eficiencia son los dos objetivos futuros del sector de transporte por carretera, para lo cual profesionales de la industria y agentes públicos han sostenido, durante un congreso sobre movilidad, que la renovación de una “envejecida” flota de vehículos debe ser fundamental.
En España, de los casi 34 millones de vehículos matriculados, según cifras de la Dirección General de Tráfico (DGT), el 64% tienen más de 10 años de antigüedad, precisamente aquellos que generan mayor cantidad de gases de efecto invernadero.
Los turismos son los que más emisiones desprenden con una cuota del 76,38% respecto al total, seguido de los camiones y furgonetas (20,18%), en base a los datos revelados por el Think Tank Movilidad de la Fundación Corell, organizadora del II Foro “Energía para una nueva movilidad”.
Por ello, la secretaria general de Transporte del Ministerio de Fomento, María José Rallo, ha explicado durante su intervención que a corto plazo “la digitalización y descarbonización son las dos grandes palancas” para asumir dicha responsabilidad medioambiental.
Rallo ha advertido de que “estamos ante un cambio de paradigma” y ha anunciado que desde su Administración se está desarrollando una estrategia con 146 medidas concretas, “alineada” con las demandas de la Unión Europea.
El presidente de la Fundación Corell, Miguel Ángel Ochoa de Chinchetru, ha querido destacar la relevancia del sector transporte en el país, con alrededor de 550.000 empleos directos y una influencia del 5,5 % en el PIB español.
Ante este escenario, Ochoa ha solicitado “prudencia y seguridad jurídica” para afrontar la transición energética y la renovación de la flota mediante “una inversión operativa”, puesto que la amortización de este tipo de planes se alcanzada pasados 7 años.
Las asociaciones ASTIC, CONFEBUS, FENADISMER, UOTC y Fitrans han firmado una declaración en la que expresan su voluntad de ser “parte activa” en el diseño de “una hoja de ruta energética con medidas previsibles, positivas y asumibles a favor de una movilidad sostenible”.
En las mesas redondas de la jornada, directivos de las principales compañías de transporte y energía de nuestro país debatieron sobre las diferentes alternativas respetuosas con el medio ambiente, tanto en su consumo como en su producción.
Además se trataron diversas iniciativas que favorezcan la libre competencia del mercado en torno a la eficiencia y la innovación, así como la adaptación fiscal a la transición energética que debe estar apoyada en la solidez política.
En esta línea, el presidente de Petronor y Tecnalia, Emiliano López Atxurra, ha opinado que “no hay futuro industrial ni capacidad empresarial sin gobernanza europea”, y que, sin eso, lo que existe es “un cuento de Eurodisney”.
“Falta un consenso de Estado, no es posible que teniendo las capacidades tecnológicas este asunto no esté en la agenda política”, ha añadido López Atxurra, quien no dudó en sumar al sector privado en este cometido.
El secretario general de Industria y Pymes, Raúl Blanco, ha compartido esta idea durante la clausura del foro teniendo en cuenta “la complejidad” de un panorama que debe incluir tanto a productores como consumidores.
Blanco ha considerado fundamental encarar los “cambios en el modelo de negocio” a través de la economía de datos, el factor humano y, sobre todo, con un consenso social que evite la inestabilidad coyuntural y fortalezca objetivos comunes “a largo plazo”.
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