La ministra de Transición Ecológica tiene claro que para cumplir con el Acuerdo de París y los compromisos europeos debe aumentar la potencia renovable instalada. De hecho, ya ha hecho números y, según ha anunciado durante la sesión de control en el Congreso de los Diputados, "España ha de facilitar la inclusión de entre 6.000 y 7.000 MW de potencia de energías renovables en el sistema eléctrico al año, de aquí a 2030".
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Esto supone que en unos diez años, el país contaría con entre 60.000 y 70.000 MW de tecnologías limpias. Pero ¿es un objetivo realista? ¿está España y el sector preparados para incorporar esa cifra?
"La propuesta de Teresa Ribera es acorde a los objetivos climáticos" explican fuentes del sector eólico, "y se necesitarían unos 5.000 millones de €/año en inversiones. Se puede hacer, de hecho lo vamos a hacer el año que viene, pero el sector necesita que se organicen nuevas subastas ya, o de lo contrario perdemos dos años cruciales y no llegamos con los proyectos para el 2020", añaden las fuentes.
"El único problema de alcanzar esas cifras serían las restricciones, es decir, las limitaciones en la producción, que podrían ser de entre 200 y 300 horas/año", concluyen.
"El crecimiento renovable anual que propone Teresa Ribera es necesario, es el mínimo para alcanzar los objetivos climáticos si España quiere cumplir con el Acuerdo de París", explica por su parte, José Donoso, director general de UNEF, "de hecho, en otros países se ha hecho, ha habido años que en Reino Unido o Alemania se han instalado hasta 4 ó 5 GW solo de fotovoltaica, y son países que no tienen ni los recursos ni tanto territorio porque está muy antropogeneizado".
"Es más, en España, ya solo este año tenemos 30 GW fotovoltaicos en promoción, y el famoso informe de la Comisión de Expertos que encargó el ex ministro Nadal hablaba de que eran necesarios hasta 45 GW en 2030 si se quería conseguir una transición energética adecuada", añade Donoso, "pero en realidad para cumplir con los objetivos europeos del 32% a 2030, debería instalarse al menos entre 50 y 60 GW solares".
A diferencia de la industria eólica, el sector fotovoltaico no ve tan necesarias las subastas. "El mercado de los 30 GW ya se ha generado sin incentivos, aunque sí estamos a favor de que se organicen nuevas subastas, porque favorecen que se garantice el precio", apunta Donoso.
"Lo importante es que ese aumento de potencia renovable se haga de una manera escalonada. Hay que evitar que pase lo de estas décadas de atrás, que durante unos años se instaló mucho, después hubo un parón y ahora en dos años se tiene que hacer todo", señala el responsable de la patronal fotovoltaica, "no solo por dar estabilidad sino porque así se desarrolla y se crea tejido industrial para este sector. Así que la respuesta es que sí es posible, si hay un mercado ordenado, se firman PPAs y se organizan subastas, porque en la industria solar no existen cuellos de botella".
Donoso considera que hay tres patas para el éxito de los objetivos renovables: "Uno, la voluntad política, con objetivos y reforma del mercado eléctrico, dos, la adecuación de REE, y tres, las Comunidades Autónomas, que deben alinearse con el gobierno central para que se puedan agilizar los tramites administrativos" concluye Donoso, "porque no hay que olvidar que en los años venideros se irán cerrando centrales eléctricas, como las de carbón o las nucleares, y habrá que sustituirlas por renovables".
"Sí que es verdad que es un objetivo ambicioso y que es cierto que debemos trabajar hacia esa transición energética", expone José María González Moya, director general de APPA, "con los estudios de prospectiva que vemos y con el objetivo que tenemos más adelante, en 2050, prácticamente hay que descarbonizar todo y electrificar la mayor parte de los usos energéticos, sí que son objetivos razonables".
Según el responsable de la patronal renovable, "es un reto para la industria nacional y para el sector poner en marcha esa cantidad de megavatios, pero creo que con políticas adecuadas a largo plazo y objetivos de planificación bien claros, sí que se pueden conseguir. El sector tiene experiencia, tiene capacidad y siempre se ha sabido adaptar a los cambios".
Teresa Ribera ha lanzado el guante al sector renovable y éste ha aceptado el desafío. Ahora solo falta conocer cómo se va a llevar a cabo.
Miguel
28/09/2018