El Sindicato Independiente de la Energía (SIE) ha advertido de que la propuesta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de recortar la retribución a las empresas energéticas, de seguir adelante en los términos planteados, podría "poner en riesgo cantidad de puestos de trabajo y un trabajo estable, de calidad y con alto nivel de formación, en un sector clave para la economía del país y motor de su desarrollo".
En una nota informativa, el sindicato, con presencia en la mayoría de las grandes empresas de gas y electricidad, muestra así su "rechazo" al cambio regulatorio planteado por el regulador, en periodo de información pública hasta el próximo 9 de agosto y que supondría un recorte en el siguiente periodo regulatorio del 7% a la actividad de distribución de electricidad, del 8,2% a la de transporte de electricidad, del 17,8% a la distribución de gas, y del 21,8% a la de transporte de gas y regasificación.
Así, la representación sindical espera que la CNMC, el Gobierno y las empresas sean capaces de "encontrar el punto de equilibrio y entendimiento necesario, en el que las posibles consecuencias formen parte del escenario, de la discusión y, por supuesto, de la solución".
Además, SIE advierte de que las propuestas de circulares, una vez superado el periodo de alegaciones, deberán ser revisadas por una CNMC que entonces tendrá una composición muy distinta a la actual debido a la renovación de seis de sus miembros en septiembre, entre ellos, su presidente, José María Marín Quemada, "lo que delata una cierta imprevisión y urgencia en un tema de tanta importancia y calado".
El sindicato también cuestiona que la propuesta puesta sobre la mesa por la CNMC logre el "doble objetivo" de abaratar los precios de la energía, "sin cuantificar y muy discutida desde distintos ámbitos", y de garantizar una retribución suficiente a las empresas para abordar las inversiones necesarias, "discutible cuando menos, ya que no se ha buscado el consenso con ellas", subraya.
De esta manera, señala que la situación de incertidumbre creada está afectando a las energéticas españolas, "que están viéndose amenazadas en su calificación internacional y en sus cotizaciones", y cuestionando las decisiones de los grandes fondos que han apostado por la inversión energética en España, "lo que podría acabar hipotecando inversiones futuras que pondrían en riesgo la estabilidad de algunas empresas y el empleo", añade.
Castigo en bolsa
Desde que se dio a conocer la propuesta de la CNMC el pasado 5 de julio, las grandes compañías eléctricas y gasistas españolas han sufrido el castigo en Bolsa, con Enagás y Naturgy como valores más castigados, ya que el mayor recorte planteado por el regulador afecta a las actividades en el sector del gas.
De hecho, la Asociación Española del Gas (Sedigas) se reunió este martes con el Ministerio para la Transición Ecológica para trasladarle su "preocupación" por la propuesta de la CNMC.
La patronal trasladó al Ejecutivo que esta medida transmite un mensaje de inseguridad a los inversores y a otras actividades dependientes del sector y afectará al tejido empresarial español, con una consecuente pérdida de empleo.
Asimismo, propuso solicitar una ampliación del plazo de alegaciones, más allá de la fecha prevista del 9 de agosto, ya que para el sector del gas el nuevo periodo regulatorio se inicia en enero 2021.
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