Las empresas energéticas tienen su reputación por los suelos. No son las peores, pero casi. El Reputation Institute presentó la edición 2015 del informe RepTrak Pulse España en la que las empresas energéticas (eléctricas y petroleras) salieron muy mal paradas. Concretamente, el sector energético (las tres principales petroleras) sacó una tasa de 58 puntos (sobre 100 posibles) mientras que las tres grandes utilities (Iberdrola, Endesa y Gas Natural Fenosa) tienen un poquito más, 58,5 puntos. Es decir, la reputación del sector energético es débil y vulnerable.
Solo peor que el sector energético se encuentran las empresas de telecomunicaciones y el sector financiero, con los bancos como las entidades con peor reputación en España y 50 puntos raspados.
En comparación con los datos de 2014, el sector energético (las petroleras) ha ido a peor, ya que el año pasado obtuvo una valoración de 59,5 puntos. Sin embargo en el caso de las tres utilities, 2014 fue el peor año en cuanto a la imagen de las grandes eléctricas con 50,3 puntos sobre 100. La mejora en el último año es notable, al subir casi 8 puntos. Cabe recordar que cuando se evaluó para 2014, el Gobierno acababa de intervenir el mercado eléctrico y anuló la subasta de diciembre de 2013 para después fijar un precio al libre albedrío. Las eléctricas salieron muy mal paradas de este hecho.
El informe no muestra las 100 empresas de mayor reputación, solo las 25 primeras, y entre ellas no se encuentra ninguna empresa energética. Entre las compañías evaluadas están Repsol, Cepsa y BP del sector petrolero y Endesa, Iberdrola y Gas Natural Fenosa, como utilities.
Es difícil saber cuáles son las verdaderas causas de por qué el sector energético está entre los peores. El Reputation Institute da una serie de claves para conseguir ser una compañía reputada. Esta organización señala que “para poder gestionar la reputación es preciso poder medirla entre cada grupo de interés relevante, establecer KPIs y desarrollar un proceso de trabajo que integre distintas áreas de la empresa. La RSE es un factor determinante en la construcción de la reputación de una empresa o institución, pero sólo en la medida en que es conocida por los grupos de interés. Una comunicación responsable es un elemento necesario para apoyar el modelo de negocio de la RSE”, dice Reputation Institute.
La transparencia es básica para la reputación. Históricamente, el sector energético, ya sean las eléctricas como las petroleras, no han brillado por su transparencia. Cabe destacar que poco a poco van mejorando y haciendo esfuerzos, sobre todo con su principal target, el consumidor final. Es el caso de las eléctricas que como decíamos anteriormente ha mejorado notablemente en el último año.
No es así con las petroleras. La fuerte caída del precio del crudo que no se ha visto tan reflejada en el precio final de los carburantes ha hecho empeorar la imagen de las compañías. A pesar de ello, las compañías suministradoras de gasolinas y gasóleos han hecho un fuerte esfuerzo de transparencia para explicar cómo se desarrolla el precio de los carburantes en España. Probablemente, este sea su verdadero talón de aquiles.