Engie tuvo en el primer trimestre 4.600 millones de euros de resultado bruto operativo (Ebitda), un crecimiento del 49 % en cifras brutas respecto al mismo periodo de 2021 y del 50,7 % en comparables que lleva al grupo energético francés a revisar al alza sus expectativas de beneficios para 2022.
Engie anunció este martes en un comunicado que su resultado neto operativo (Ebit) creció un 74 % en términos absolutos y un 76,4 % en comparables hasta 3.532 millones de euros en un contexto marcado sobre todo por la escalada de los precios de la energía.
Una escalada que quedó también reflejada en la facturación, que dio un salto del 85 % en datos absolutos y del 84,4 % en equivalentes hasta 25.600 millones de euros.
La deuda**** de la empresa se situaba a fecha del pasado 31 de marzo en 27.300 millones de euros, lo que significa 2.000 millones de euros más que al terminar 2021.
Los datos de Engie
Engie indicó que, teniendo en cuenta el "muy buen resultado" del primer trimestre, ahora anticipa un resultado neto recurrente para el conjunto de 2022 de entre 3.800 y 4.400 millones de euros, con un Ebitda de entre 11.700 y 12.700 millones y un Ebit entre 7.000 y 8.000 millones. Son cifras superiores a las de su objetivo hasta ahora.
Al mismo tiempo, reafirmó su política de dividendo, basada en el principio de la distribución del 65 % al 75 % del resultado neto recurrente, con un mínimo de 0,65 euros por acción en el periodo de 2021 a 2023.
La consejera delegada, Catherine MacGregor, se mostró convencida de que la tensión actual en el mercado de la energía "refuerza la pertinencia de nuestra estrategia, y en particular la de nuestro modelo integrado" con una combinación energética "equilibrada".
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