En un contexto marcado por la urgencia de abordar el cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, el papel del biometano se erige como un elemento fundamental en la transición hacia un sistema energético más sostenible y descarbonizado. En este sentido, España emerge como un actor clave en la consecución de los ambiciosos objetivos europeos de producción de este gas renovable, fijados en 35.000 millones de metro cúbicos (35 bcm) en 2030.
La jornada "Biometano: una hoja de ruta para liberar su potencial de producción en Europa", celebrada en el día de ayer en Madrid y organizada por la Asociación Española del Gas (Sedigas) y Biomethane Industrial Partnership Europe, destacó el papel crucial que desempeña el biometano en el futuro energético sostenible de Europa y su relevancia para una transición energética eficiente, justa e inclusiva.
Estimaciones europeas
Joan Batalla, presidente de Sedigas, subrayó la importancia estratégica del biometano en el marco de las políticas energéticas europeas, señalando que España desempeña un papel fundamental en el cumplimiento de los objetivos de producción de 35.000 millones de metros cúbicos (35 bcm) de biometano al año para 2030, establecidos en el Plan REPowerEU de la Comisión Europea.
Así, recordó que la Comisión Europea elaboró un informe país en el que por primera vez se incluyó una mención específica al potencial español en biometano como palanca estratégica para la transformación del sistema energético y la descarbonización de la economía. Según las propias estimaciones de la Comisión Europea, España dispone de capacidad para producir 4.100 millones de metros cúbicos de biometano al año en el horizonte 2030, que podrían reemplazar un volumen de gas de hasta 47,7 teravatios hora (TWh).
España es el tercer país de la Unión Europea con mayor potencial de producción de biometano, con 163 TWh/año, que permitiría descarbonizar el equivalente al 50% de la demanda de gas natural.
Potencial
El Plan REPowerEU de la Comisión Europea reconoce al biometano como un componente clave para alcanzar la independencia energética y los objetivos climáticos de Europa, fomentando la seguridad de suministro y apoyando la competitividad de las industrias intensivas en energía. Además, promueve la reducción de emisiones en sectores residenciales, industriales y de movilidad, incentivando el desarrollo de capacidades de producción eficientes.
En el ámbito nacional, España cuenta con un alto potencial de producción de biometano, especialmente debido al considerable tamaño de su sector agroalimentario y ganadero. Según el informe de la EBA, España se clasifica entre los países europeos con mayor capacidad de generación de biometano. La expansión del sector es evidente, con un aumento significativo en el número de instalaciones y el volumen inyectado a la red en los últimos años.
James Watson, secretario general de Eurogas, destacó el papel crucial que puede desempeñar el biometano en sectores difíciles de descarbonizar, como el agrícola. Los agricultores y ganaderos pueden convertirse en parte de la solución al utilizar los subproductos de su actividad para generar biometano, reduciendo así las emisiones y aumentando sus ingresos.
Sin embargo, a pesar del potencial identificado, el marco regulatorio y las políticas deben ser diseñados para eliminar obstáculos y proporcionar incentivos claros para la inversión en biometano. La simplificación de la burocracia administrativa y un entorno legislativo favorable son elementos fundamentales para desbloquear todo el potencial del biometano en España y en Europa.
pepe
28/02/2024