Fitch estima que el control de la producción de petróleo de la OPEP tendrá un impacto "limitado" a partir de 2019

El recorte a la producción de petróleo que está llevando a cabo la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) junto a otros Estados productores de crudo tendrá un impacto "limitado" en el control de los precios después de 2018, según una estimación de Fitch publicada este miércoles.

La agencia de calificación opina que la mayoría de economías y empresas petroleras se han acostumbrado a que el precio del crudo sea "bajo" y se mueva en el entorno de los 60 dólares por barril. Por otro lado, la capacidad para intentar incrementar los precios por parte del cártel petrolero también se verá limitada a largo plazo por el menor crecimiento de la demanda, como consecuencia del incremento del uso de los coches eléctricos.

Fitch, no obstante, ha ajustado sus previsiones sobre el precio del petróleo para los próximos años. Mientras que la anterior estimación apuntaba a que el precio unitario del barril de Brent, de referencia para Europa, se mantuviera en 57,5 dólares desde 2018 hasta 2019, la agencia de calificación ahora considera que el precio medio este año rondará los 70 dólares. En 2019 será de 65 dólares por barril y solo a partir de 2020 se estabilizará en torno a 57,5 dólares.

De la misma forma, la previsión sobre el barril West Texas, de referencia para Estados Unidos, también crece. La anterior estimación de Fitch situaba el precio para los próximos tres años en 55 dólares. Sin embargo, la agencia de calificación pronostica que en 2018 el precio medio será de 65 dólares, para bajar a 60 en 2019 y a estabilizarse en 55 a partir de 2020.

"Consideramos que la producción de petróleo de esquisto de Estados Unidos se va a mantener como uno de los principales motores en el crecimiento de la oferta en los próximos años", ha defendido Fitch.

Al mismo tiempo, la firma ha avanzado que en la próxima reunión de la OPEP, que tendrá lugar el 22 de junio, Rusia y Arabia Saudí presionarán al cártel para aumentar la producción como consecuencia del menor bombeo de crudo de Venezuela y la reimposición de las sanciones a Irán por parte de Estados Unidos, que también afectan a la exportación de petróleo.