El grupo de países más industrializados del mundo instará en el comunicado final de la cumbre del G7, que será emitido este martes, a que se efectúen consultas "urgentes" con terceros países para poner un precio tope a las exportaciones de petróleo ruso.
Así lo señaló un funcionario de alto rango de la Casa Blanca en una llamada con periodistas, en la que precisó que los líderes del G7 encargarán en su declaración final a los ministros concernidos "que trabajen urgentemente para llevar a cabo consultas con terceros países y el sector privado en un esfuerzo para desarrollar un precio tope al crudo" ruso.
"Estamos deseando (ver) el trabajo que los ministros hagan de forma urgente en los próximos días, semanas", remarcó la fuente.
Una fuente de la Casa Blanca anticipó el lunes que el G7 ultimaba un acuerdo para poner un precio límite a las exportaciones de petróleo ruso a países fuera de EEUU, la Unión Europea (UE) y del grupo de las siete naciones más industrializadas del mundo.
Dicha fuente indicó que el objetivo de la medida es cortar "la principal fuente de ingresos rusa" y obligar a que baje el precio del crudo de Moscú, minimizando al mismo tiempo el impacto sobre las economías del G7 (grupo integrado por EEUU, Alemania, Francia, el Reino Unido, Italia, Canadá y Japón).
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