Giles Dickson deja su cargo como CEO de WindEurope

Giles Dickson, director ejecutivo de WindEurope desde 2015, ha decidido poner fin a su etapa al frente de la organización europea tras una década de liderazgo, con el objetivo de emprender una nueva carrera como docente en el Reino Unido. La Junta Directiva de WindEurope ya ha iniciado el proceso de selección para encontrar a su sucesor, quien tomará el relevo en la segunda mitad de 2025.

Durante estos diez años, Dickson ha sido una figura clave en la expansión de la energía eólica tanto en tierra como en mar, y ha jugado un papel central en el impulso de los ambiciosos planes de energías renovables en Europa. Bajo su dirección, WindEurope ha consolidado su influencia en la política energética europea y ha fortalecido el papel de la energía eólica como pilar de la transición energética del continente.

“Estoy increíblemente orgulloso del progreso que ha logrado la energía eólica en Europa en la última década”, declaró Dickson. “Agradezco profundamente el compromiso de todos en WindEurope y de quienes han contribuido a impulsar esta industria durante mi mandato. Ahora espero regresar a casa y devolver algo a la sociedad que me vio crecer. La eólica es una industria fantástica, y ha sido un privilegio servirla” añadió.

Comité de nominaciones

La decisión de Dickson ha sido recibida con reconocimiento y gratitud por parte de la Junta Directiva de WindEurope. “En nombre de toda la Junta, pasada y presente, quiero agradecer a Giles por su enorme contribución no solo a WindEurope, sino también al desarrollo del sector eólico en Europa. Su liderazgo ha fortalecido a la organización y nos deja mejor preparados para afrontar los retos futuros” destacó Henrik Andersen, presidente de la asociación.

La Junta ha conformado un comité de nominaciones, integrado por miembros seleccionados, incluido el presidente y el vicepresidente, que liderarán la búsqueda del nuevo CEO.

La energía eólica representa actualmente el 20% del consumo eléctrico europeo. Gracias a su desarrollo, la Unión Europea evita la importación de 100.000 millones de metros cúbicos de combustibles fósiles al año. La industria genera 370.000 empleos directos e indirectos, con una proyección de crecimiento hasta los 600.000 empleos para 2030, y aporta 52.000 millones de euros anuales al PIB europeo.

Cada nuevo aerogenerador añade en promedio 16 millones de euros a la economía, y las más de 250 fábricas del sector están repartidas por todo el continente, incluyendo regiones económicamente desfavorecidas.