Autoridades energéticas de Estados Unidos han descubierto dispositivos de comunicación no autorizados dentro de inversores solares fabricados por empresas chinas. Estos componentes, según expertos consultados por Reuters, podrían representar un riesgo significativo para la seguridad de las redes eléctricas.
Los inversores solares —elementos clave que convierten la energía solar en electricidad utilizable— suelen estar conectados a sistemas críticos de energía. De acuerdo con la información, marcas como Huawei, Sungrow y Ginlong Solis, líderes en la fabricación de estos dispositivos, están en el punto de mira de la investigación. Aunque estos equipos están diseñados para recibir actualizaciones remotas, los investigadores encontraron radios celulares y otros dispositivos de comunicación no documentados que podrían eludir los cortafuegos implementados por operadores eléctricos.
Además de los inversores, se hallaron radios no registradas en algunas baterías de origen chino, lo que amplifica la preocupación por una posible manipulación remota de equipos conectados a la red. El caso se suma a un incidente ocurrido en noviembre de 2024, cuando ciertos inversores fueron desactivados remotamente desde China, una situación que puso en alerta a las autoridades estadounidenses.
Restricciones e inquietud
El Departamento de Energía de EEUU ha reaccionado promoviendo el uso de “equipos de confianza” y solicitando mayor transparencia en las funciones de los dispositivos conectados. También se están debatiendo restricciones a la compra federal de baterías e inversores de origen chino.
Leo
15/05/2025