Iberdrola ha registrado durante 2016 el mejor dato de calidad del suministro eléctrico en la Comunitat Valenciana al cerrar el año con un Tiempo de Interrupción Equivalente a la Potencia Instalada (TIEPI) de 56,4 minutos, lo que supone una mejora del 18% respecto a 2015.
En esta mejora han influido las inversiones realizadas en nuevas infraestructuras eléctricas y en el mantenimiento y renovación de las ya existentes, y el despliegue en curso del programa de instalación de contadores inteligentes y el plan de supervisión y automatización de la red asociado, ha informado en un comunicado.
Iberdrola señala que las interrupciones del servicio programadas para realizar estos trabajos también se contabilizan para el dato general de disposición del servicio, por lo que en caso de excluirse estas paradas por trabajos programados en la red, la mejora de la calidad sería aún mejor.
Durante 2016 Iberdrola Distribución ha revisado más de 16.500 kilómetros de líneas eléctricas en la Comunitat para reforzar la seguridad de suministro, con el objetivo de seguir mejorando la calidad del servicio que ofrece a sus clientes.
Ha inspeccionado líneas de muy alta, alta y media tensión de cara a garantizar su fiabilidad y funcionamiento en las mejores condiciones frente a las inclemencias meteorológicas.
De esta manera, ha revisado 8.600 kilómetros de líneas aéreas, así como otros 3.200 kilómetros de líneas subterráneas, y ha analizado utilizando termografía 4.500 kilómetros y ha realizado labores de poda y mantenimiento de pasillos eléctricos a lo largo de 300 kilómetros.
Las revisiones de las líneas aéreas están orientadas a detectar posibles anomalías en los elementos que componen este tipo de instalaciones: aisladores, conductores, herrajes, apoyos, etcétera, dañados por rayos, arbolado, obras de construcción o edificaciones próximas, entre otras causas.
La compañía también ha comprobado por infrarrojos -análisis termográfico- 4.500 kilómetros de líneas aéreas, a partir del reconocimiento de las infraestructuras eléctricas mediante cámaras termográficas transportadas en helicóptero o por un equipo de operarios a pie.
Se mide así la temperatura de las instalaciones, lo que permite detectar aquellos puntos que mantienen temperaturas inadecuadamente altas -puntos calientes- para corregirlos y asegurar el suministro ante una posible punta de demanda.
Iberdrola también ha realizado trabajos de limpieza de los pasillos por donde discurren las líneas, con la poda de árboles con mayor riesgo de contactar con los tendidos a lo largo de 300 kilómetros de líneas.