Un nuevo informe de BloombergNEFG muestra que las adiciones de energía eólica marina alcanzarán un nuevo máximo en 2024, a medida que varios mercados más nuevos, incluidos Estados Unidos, Francia y Taiwán, aumenten su construcción.
La reciente inflación de costos y las limitaciones de la cadena de suministro han llevado a muchos desarrolladores a reorientar sus carteras y frenar su entrada a nuevos mercados. Esto ha dado lugar a resultados mixtos en subastas recientes, a pesar de que algunos gobiernos suavizaron los términos de los contratos.
Las subastas de energía eólica marina están a punto de experimentar un auge, respaldando una fuerte trayectoria de crecimiento, y la capacidad está en camino de multiplicarse por 10 para 2040, alcanzando los 742 gigavatios (GW).
BNEF espera que 18,3 GW de energía eólica marina entren en operación comercial en 2024, gran parte de ella en China continental, Taiwán, Países Bajos y Francia. Se trata de un aumento importante con respecto a los 10,7 GW en 2023. La construcción está en camino de multiplicar por 10 el crecimiento acumulado hasta 2040, la primera vez que BNEF extiende su pronóstico de energía eólica marina a este horizonte.
China continental, el Reino Unido y Estados Unidos lideran las instalaciones. Mientras que mercados como Francia, Japón y Corea del Sur adjudicaron contratos de energía eólica marina a precios récord en los últimos seis meses, las subastas en Estados Unidos arrojaron proyectos más caros.
En el mercado estadounidense se espera que hasta finales del tercer trimestre de 2025 se adjudiquen hasta 125 GW de arrendamientos y contratos de energía eólica marina, lo que impulsará la construcción hasta la década de 2030.
Después de una actividad financiera récord el año pasado, los acuerdos de nueva construcción se han estancado en lo que va de 2024. Sin embargo, las adquisiciones están en camino de alcanzar un nuevo récord este año, ya que el intercambio de proyectos en etapas anteriores de desarrollo aumenta la capacidad adquirida.
Los promotores ganadores de la licitación flotante de Francia planean utilizar máquinas de 24,5 megavatios, a pesar de que los fabricantes estadounidenses y europeos están reduciendo sus planes para turbinas más grandes. En el mercado estadounidense, GE abandonó un modelo de 18 GW lo que resultó en un factor clave en la cancelación de 4 GW de contratos en Estados Unidos, mientras que los actores chinos han seguido avanzando fuera de su mercado local, consiguiendo pedidos en Corea del Sur.
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