El Ministerio Italiano de Desarrollo Económico (MISE) ha sacado un nuevo decreto para promover las energías renovables a través de 20 islas menores del país, entre las que están Capri, Stromboli o Lampedusa. El objetivo del mismo es transformar las pequeñas islas en pequeños talleres abiertos en los que experimentar con soluciones innnovadoras de energía renovable.
El decreto establece el plazo para el desarrollo de las energías renovables y la necesidad de energía que se espera que las islas cubran con energías renovables para el año 2020. El objetivo inicial para 2020 es conseguir instalar potencia renovable suficiente para, al menos, cubrir el 10% de la demanda total de electricidad, y los paneles térmicos y bombas de calor para la producción de agua caliente sanitaria suficiente para reducir en un 5% el consumo eléctrico.
Las nuevas normas regulan la instalación de sistemas renovables residenciales y comerciales, así como las instalaciones solares que suministran energía a las estaciones de recarga para vehículos eléctricos. Todos los sistemas fotovoltaicos y de energía renovable instalados en las islas menores tendrán derecho a inyectar toda o parte de su producción de energía a las redes de las islas.
Para cada una de las 20 islas (ver gráfico)se establecen objetivos mínimos de desarrollo del uso de fuentes de energía renovables para el 31 de diciembre 2020, tanto en calor como en sistema eléctrico. Por ejemplo, para la isla siciliana de Pantelleria se fija un objetivo de potencia renovable de 2.720 kW en electricidad y 3.130 kW térmicos. Luego están los especiales “proyectos innovadores integrados” que pueden incluir parques eólicos marinos o energía mareomotriz.
“Se trata de una gran noticia -dice Edoardo Zanchini , vicepresidente de la organización ecologista Legambiente– porque hoy las islas están siendo un ejemplo vio de cómo se puede transformar un sistema energético convencional y convertirlo en uno 100% renovable. Desde Canarias hasta los mares del norte, desde la Polinesia a Alaska, cada vez hay más islas que se han independizado de los combustibles fósiles y están orientadas a lograr un turismo sostenible”.
“El objetivo de la medida es dar una mayor seguridad y sostenibilidad a los sistemas energéticos de las islas más pequeñas y promocionar las políticas del gobierno en favor de las energías renovables y la eficiencia energética, en el curso de un mayor desarrollo con la nueva Estrategia Nacional de Energía (SEN)“, según dice el comunicado del MISE.
Cada kWh de energía autoconsumida o inyectada a la red será remunerado con un arancel adicional, cuya cantidad será ajustada por el regulador italiano de energía y gas AEEGSI. La tasa será proporcional al coste del combustible ahorrado para la generación de electricidad. Estos incentivos, sin embargo, no podrán acumularse con los concedidos por otros esquemas de incentivos de energía renovable italianos como el Conto Energia.
La nueva legislación incluye la mejora de las redes de las islas. El programa será cofinanciado por la Comisión Europea y la tasa de UC4 para las islas menores, que es pagada por los consumidores de energía.